Casi dos años en tramitación tienen algunos de los sumarios iniciados por la Dirección Regional de Gendarmería a partir de la docena de recursos de amparo por apremios ilegítimos en los penales Bío Bío y El Manzano.

Así lo reconoció el coronel Pablo Toro, jefe del organismo penitenciario en la Octava Región, al puntualizar además que hasta ahora no se ha acreditado la responsabilidad de gendarmes en los hechos deunciados por presos.

La nula responsabilidad administrativa a la que alude el director de Gendarmería no se condice con lo establecido por la Corte Suprema y la Corte de Apelaciones de Concepción, que han acreditado las golpizas, lo que se ha traducido a su vez en denuncias al Ministerio Público.

Quizás ante la demora en las resoluciones, cuestionada también por la justicia en los últimos fallos dictados, es que el seremi de Justicia, Jorge Cáceres, informó que había oficiado a Gendarmería al respecto.

Los maltratos a condenados de las cárceles penquistas han sido denunciados como torturas por el Instituto de Derechos Humanos, organismo querellante en causas donde la Fiscalía ya ha imputado a gendarmes, teniendo programada una nueva formalización de cuatro guardias penitenciarios el próximo 24 de junio.