Por razones familiares el médico Jorge Ramos, renunció a la dirección del Servicio de Salud Chiloé. El proceso de alta dirección pública para nombrar a un nuevo directivo podría extenderse por cerca de 6 meses.

Su renuncia, según explicó Ramos, obedece a una difícil situación familiar que hace imprescindible su retorno a la región del Bío Bío.

Lo anterior, aseguró que ya fue comunicado a la Ministra de Salud y durante la jornada de este viernes se reunió con los funcionarios y funcionarias para informarles que dejaría la dirección de la institución.

Es importante señalar que el médico cirujano de profesión, ganó el concurso de alta dirección pública, siendo nombrado en enero en medio de los cuestionamientos hacia la ex directora de salud.

Pese a ser cinco meses de gestión, fueron intensos para Ramos producto de la actual situación que vive la salud en la isla, como la normalización de los hospitales y la accidentada puesta en marcha del centro de diálisis de Quellón.

Tras su renuncia, dijo esperar que la persona que lo reemplace pueda impregnarle un sello de cercanía al servicio, y pueda conocer terreno las problemáticas que enfrenta la red asistencial del archipiélago.

En este sentido, aprovechó de comentar que la elección del nuevo director o directora, es decisión del Ministerio de Salud, proceso que podría extenderse por cerca de 6 meses.

Hay que indicar que tras la llegada de Ramos a la zona, existían bastantes esperanzas en su labor al mando de la dirección provincial de salud, teniendo como desafío recuperar las confianzas con los gremios y la comunidad.

Por ahora, se presume que el subdirector médico del Servicio, doctor Francisco Molina, quedará a la cabeza de manera interina.