Las víctimas de un violento operativo policial registrado el 6 de enero en la localidad mexicana de Apatzingán habrían sido ejecutadas por policías federales, según un reportaje publicado el domingo por la revista Proceso y el portal Aristegui Noticias.
En base a 39 testimonios anónimos, videos, documentos y otros elementos, la periodista y escritora Laura Castellanos reconstruyó el operativo que tuvo lugar en la madrugada del 6 de enero y que se inició con un violento desalojo de un grupo de expolicías rurales que mantenían un plantón afuera de la alcaldía de Apatzingán, una convulsa ciudad de Michoacán (oeste).
De acuerdo con la versión oficial difundida entonces ese día murieron nueve personas como consecuencia de enfrentamientos entre los expolicías rurales y la Policía Federal y por el fuego cruzado entre presuntos pistoleros, mientras que otras 44 fueron detenidas.
Sin embargo, según este reportaje los muertos habrían ido 16.
La oficina de Monte Alejandro Rubido, Comisionado Nacional de Seguridad, dijo el sábado en un comunicado que recibió de manera anónima un video “del cual se puede inferir un uso excesivo de la fuerza o abuso de autoridad por parte de elementos de la Policía Federal” en Apatzingán.
La dependencia señaló que el video anónimo fue entregado a la Procuraduría General de la República (PGR) para iniciar una investigación. La fiscalía no aclaró si se trata del mismo hecho.
De acuerdo con unos 16 testimonios cuyo audios fueron publicados en el portal de Aristegui Noticias, los testigos, que se mantienen en el anonimato, aseguran que las víctimas no dispararon, que estaban desarmadas y que fueron ejecutadas por los policías federales.
“‘Mátenlos como perros’, gritaron los policías federales al atacar a tiros a un centenar de miembros y simpatizantes de la Fuerza Rural que estaban en plantón”, inicia el reportaje.
“No se pueden salir, ninguno, ¡están tirando los federales!”, se escucha en una de las grabaciones de uno de los expolicías rurales que pide auxilio en otro momento de la violenta jornada.
Los acontecimientos del 6 de enero se desencadenaron luego de que el gobierno anunció la desintegración de las fuerzas rurales, que estaban integradas por exautodefensas.
Michoacán entró en crisis en febrero de 2013 cuando grupos de autodefensas se levantaron contra el cártel de Los Caballeros Templarios, al que acusaban de secuestrar, extorsionar y asesinar a la población.
Luego de capturar o abatir a los principales líderes del cártel, en mayo de 2014 el gobierno de México legalizó a estos grupos de milicianos a los que más tarde les quitó este estatus.