Sufrir de ansiedad, muchas veces nos genera sufrir situaciones que nos haría fácilmente plantearnos cómo es posible que un hecho esté vinculado a otro… pero el organismo humano es así.
Si crees que lo sabes todo acerca de este estado, sería bueno que conozcas estos cinco síntomas que el sitio de información médica Prevention entrega, y que nos puede dar luces de que efectivamente, estás pasando por un cuadro de ansiedad.
Gases
Sufrir de gases y eructos en público, puede fácilmente ser otras de tus preocupaciones en momentos de ansiedad. Esto preferentemente ocurre cuando comes o bebes muy rápido, lo que mezclado a unos intestinos hiperactivos, hacen reflotar esos incómodos aires.
Anne Marie Albano, médico del Columbia University Medical Center, indicó que “el gas se genera cuando el ácido en el estómago se revuelve” con la comida, mientras el nerviosismo recorre todo el cuerpo.
Otra causa, es respirar muy rápido, en un intento desesperado por calmarte. En razón de ello, tanto aire que ingresa, debe también salir, por lo que se expresa en el título de este apartado.
Manos y pies fríos
Un clima frío, o una mala circulación, puede dejar los dedos y pies fríos al tacto. Sin embargo, si eso ocurre con una sensación incómoda en el estómago, lo más seguro es que estés sufriendo de ansiedad.
“Cuando estás ansioso, el flujo de sangre de las extremidades se redirecciona hacia los órganos más grandes del torso”, en una forma de proteger al corazón en un modo de supervivencia, explica Albano.
Lamentablemente, nuestro organismo no diferencia entre efectivamente estar sufriendo una escena de vida o muerte, o estar atrasado a una prueba o al trabajo.
Erupciones en la piel
Las emociones y nuestra piel, tienen una conexión sabida. Como por ejemplo, cuando alguien se pone ruboroso ante cierta situación incómoda. Pues algo así también pasa cuando estás con ansiedad, que puede desencadenar brotes de eczema, u otras sensibilidades y alergias.
Cuando estas nervioso o tenso, debido a cualquier evento u ocasión, el cuerpo produce un exceso de cortisol. Este aumento del nivel de cortisol deriva a producir exceso de sebo para al piel, que al combinarse con las bacterias cutáneas, genera estas erupciones, que pueden generar acné, por ejemplo.
Bostezos frecuentes
Cuando estamos aburridos o cansados, tendemos a bostezar, sin embargo esto también ocurre cuando estamos nervioso. Ello ya que en algunas personas, esta ansiedad les hace respirar más rápidamente que el promedio de la gente. Este aumento en el ritmo de respiración, hace al cerebro pensar que no estás recibiendo suficiente aire, por lo que manda a bostezar para tomar un aire más profundo.
Sensación de irrealidad
Se da en menor medida, pero puede también ocurrir cuando una persona sufre de ansiedad. Esta desrealización es una alteración de la percepción del mundo exterior del individuo, de forma que aquel se presenta como extraño o irreal. Según explica Albano, es como si una persona viera hacia abajo, y sintiera que observa desde arriba. Ello se produce en respuesta a eliminar cualquier estímulo innecesario en torno a lidiar con el asunto en cuestión, es decir, su ansiedad.