Chile podría convertirse en el primer país de Latinoamérica en el que se realice una reconstrucción facial. Se trata de un hombre de 29 años que hace diez, recibió un disparo en el rostro que desfiguró su cara, impidiéndole hasta el momento comer, respirar y hasta cerrar los párpados con normalidad.

Según el cirujano plástico de la Clínica Las Condes, Alejandro Conejero, esta intervención podría devolverle la funcionalidad de su rostro, si es que aparece un donante compatible.

Se trata de una intervención compleja, que podría extenderse entre 14 y 20 horas y para la cual, el posible donante debe compartir con el paciente el grupo sanguíneo, sexo y tipo de piel. Además, debe tener similar fisonomía y tener una edad entre estar los 20 y 40 años.

Cabe mencionar que en el mundo sólo se han realizado 20 trasplantes faciales, el primero de ellos fue el 2005 en Francia.

Según Ana María Arriagada, presidenta de la Corporación del Trasplante, este tipo de intervención no busca salvar vidas, a diferencia del trasplante de órganos, sino que tiene como objetivo mejorar la calidad de vida del paciente.

La cirugía representa para el paciente la posibilidad de conectarse con su entorno familiar y social, tras haber sufrido un trauma severo de su cara, que lo dejó con una secuela ósea y de tejidos blandos que alteró su apariencia de manera definitiva, indicaron en el centro asistencial.

La severidad de sus secuelas impide realizar una cirugía reconstructiva con técnicas tradicionales, por lo que el trasplante facial parcial es la única opción de tratamiento, según los especialistas.

Todo el proceso que contempla esta compleja intervención, será apoyado por equipos altamente especializados en cirugía plástica y reconstructiva, maxilo-facial, cirugía cabeza y cuello, medicina de trasplante, infectología, oftalmología y psiquiatría. Incluso, el caso fue evaluado por un Comité de Ética compuesto por miembros ajenos a la institución, informó la clínica.