Un hombre de 26 años fue puesto a disposición de la justicia por su participación en el robo de joyas y otras especies. El delito avaluado en un millón 500 mil pesos, habría sido cometido en una vivienda en la que trabajaba, aprovechando la confianza de su empleadora.

El 14 de octubre la mujer denunció la desaparición de joyas, documentos bancarios y otros artículos en la Policía de Investigaciones (PDI) de Osorno, comenzando la investigación la Brigada Criminalística de la entidad.

Tras revisar el domicilio, se comprobó que ninguna vía de acceso fue forzada, por lo que la hipótesis de que una persona vinculada a la víctima podría estar involucrada, cuestión que se comprobó luego de que se verificara que uno de los documentos bancarios sustraídos habría sido cobrado por la esposa de un trabajador del inmueble.

Tras ser interrogado, el sujeto confesó que aprovechando los descuidos de su empleadora hurtó las especies sustraídas, entregado además detalles respecto al lugar donde fueron reducidas.

El hombre paso a la justicia, imputado por hurto gravado y falsificación de instrumento privado.