El presidente Barack Obama y la canciller alemana Angela Merkel advirtieron este viernes que Rusia estaba desencadenando una “peligrosa escalada” del conflicto en Ucrania, por su presencia militar en la frontera y enviando un convoy humanitario.

En una conversación telefónica de la que informó la Casa Blanca, los dos dirigentes estimaron que era “imperativo” que el convoy abandone el territorio ucraniano, valorando que el envío de esta columna de 300 camiones sin autorización de Kiev constituía una “provocación suplementaria y una violación de la soberanía de Ucrania”.

Obama y Merkel expresaron además “su preocupación por que el gran número de tropas rusas en la frontera de Ucrania, la presencia del personal militar ruso en Ucrania y el bombardeo de territorio ucraniano representa una peligrosa escalada” del conflicto.

Según el Ejecutivo estadounidense, Obama dijo que el conficto “continuó deteriorándose” desde que un avión de Malaysian Airlines fue derribado el pasado mes sobre territorio ucraniano en manos de los rebeldes prorrusos.

Occidente acusa a los separatistas apoyados por Rusia de haber derribado el avión, mientras que Moscú culpa a Ucrania.

Ambos líderes políticos pidieron a Rusia que retire sus tropas de la región y detenga el flujo de armas, vehículos y personal al este de Ucrania, así como que retire lo que ya esté dentro del país.

“Subrayaron la importancia de un cese el fuego bilateral acompañado de un cierre y un monitoreo efectivo de la frontera”, concluyó el reporte.