Al menos cuatro palestinos murieron este viernes en ataques aéreos israelíes en la Franja de Gaza, en el día número 46 del conflicto al que los europeos quieren poner fin con una resolución que presentan en el Consejo de Seguridad de la ONU.

Dos palestinos de 22 y 24 años murieron en un ataque israelí contra una vivienda de Nuseirat, en el centro del territorio. Otros dos murieron en Deir al Balah (centro), dijo a la AFP el portavoz de los equipos de emergencia, Ashraf al Qodra.

Los ataques nocturnos israelíes fueron, pese a todo, menos intensos que en las noches que siguieron la ruptura de este martes por la noche de un alto el fuego respetado durante nueve días, y la eliminación de tres altos mandos del brazo armado de Hamas este jueves.

Casi 2.090 palestinos han muerto desde que comenzó el 8 de julio la campaña militar israelí “Barrera Protectora” contra el movimiento islamista Hamas, que controla la Franja de Gaza.

En el bando israelí han muerto 64 soldados -cinco de ellos por “disparo amigo” de sus propias filas- y tres civiles -dos israelíes y un tailandés- en los disparos de cohetes desde Gaza.

Las negociaciones indirectadas entre Israel, que reclama la desmilitarización del territorio palestino, y Hamas, que pide el fin del bloqueo impuesto a la franja desde 2006, están “muertas”, según Hamas.

El gobierno israelí buscaba por su parte el apoyo diplomático de Estados Unidos de cara a la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, que preparan Gran Bretaña, Francia y Alemania para poner fin a la violencia, según la prensa israelí.

Washington ha hecho uso de su derecho de veto en repetidas ocasiones en defensa de su aliado israelí, pero las relaciones se han deteriorado con el fracaso de las negociaciones de paz y el elevado número de civiles muertos en Gaza.

Una propuesta anterior de Jordania, en nombre de la Liga Árabe, ya chocó con las reticencias de Estados Unidos.

El texto europeo pide un alto el fuego inmediato y duradero y el levantamiento del bloqueo israelí. Además, propone un mecanismo para vigilar el alto el fuego y supervisar la entrada de productos a Gaza, en respuesta a las preocupaciones de seguridad israelíes.

También pide que recupere el control de Gaza la Autoridad Palestina, respaldada por los occidentales y liderada por el presidente Mahmud Abas. Fue expulsada del territorio en 2007 por los islamistas de Hamas, que en 2006 ganaron las elecciones legislativas.

El texto estipula el levantamiento de los restricciones económicas y humanitarias a Gaza, para permitir un esfuerzo masivo de reconstruccicón.

“No vamos a parar”

Pese a las presiones, Israel no ha dado señal de querer poner fin a su campaña destinada a acabar con el disparo de cohetes por parte de los milicianos de Gaza.

El gabinete de seguridad autorizó la movilización de otros 10.000 reservistas para permitir la rotación de las tropas, indicó la prensa israelí.

El ministro de Finanzas Yair Lapid, considerado uno de los menos duros del gabinete de seguridad, amenazó con nuevos ataques contra los líderes de Hamas.

“Los dirigentes de Hamas deben saber que no vamos a parar”, dijo el viernes a la radio pública.

“Cada uno de ellos -el brazo político, el militar, en el extranjero o en la propia Gaza – debe saber que es un blanco legítimo de asesinato mientras sigan amenazando a los ciudadanos israelíes”, indicó.