La Organización Mundial de la Salud (OMS) estimó este martes, en una sexta reunión de urgencia sobre el coronavirus MERS, que la situación continúa “grave”, si bien no declaró el “estado de emergencia” sanitaria ante la ausencia de una transmisión durable del virus entre humanos.

El director general adjunto de esta agencia de la ONU, Keiji Fukuda, destacó la disminución de casos y subrayó “los importantes esfuerzos desplegados para reforzar las medidas de prevención y de control en Oriente Medio y en particular en los países afectados”.

Asimismo, el comité de la OMS concluyó “por unanimidad que no se reúnen las condiciones de emergencia de salud pública de alcance mundial”.

Sin embargo, para la agencia de Naciones Unidas, la vigilancia debe mantenerse, máxime cuando se prevé un aumento de las peregrinaciones a la ciudad saudita de La Meca con motivo de varias festividades musulmanas. La enfermedad se detectó por primera vez en Arabia Saudita.

El coronavirus MERS está considerado un pariente más mortal pero menos contagioso del virus responsable del Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SRAS), que provocó la muerte en 2003 de cerca de 800 personas en todo el mundo.

Desde septiembre de 2012, la OMS detectó 701 casos de este virus (al menos 249 muertes) en varios países del mundo, entre ellos, Arabia Saudita, Jordania, Egipto, Líbano, Estados Unidos, Argelia, Emiratos Árabes Unidos e Irán.