Estados Unidos acusó este jueves a los países de América Latina y el Caribe de “traicionar” los principios democráticos, al respaldar el régimen cubano durante una cumbre regional en La Habana, dijo un portavoz del Departamento de Estado.
“Estamos decepcionados que la Celac (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños), en su declaración final, traicionó la dedicación declarada de la región a los principios democráticos, al respaldar el sistema unipartidista en Cuba”, dijo el portavoz.
Posiblemente en el espaldarazo más fuerte de América Latina y el Caribe a Cuba desde 1959, una treintena de jefes de Estado de la región, así como los líderes de la Organización de Estados Americanos y la ONU, acudieron a La Habana para la cumbre del organismo, que excluye a Estados Unidos y Canadá.
En el acuerdo más simbólico de la cita, finalizada el miércoles, el presidente cubano Raúl Castro proclamó como “zona de paz” a América Latina y el Caribe, una región donde perviven muchas disputas fronterizas.
Los 33 países asumieron “el compromiso permanente con la solución pacífica de controversias a fin de desterrar para siempre el uso de y la amenaza de la fuerza en la región”, dijo Castro.
Pero el encuentro enfureció a Washington, que mantiene un embargo contra la isla.
El gobierno estadounidense encontró la declaración “particularmente inexplicable” para una organización que “supuestamente apoya la democracia y los derechos humanos”, señaló el funcionario del departamento de Estado, que solicitó el anonimato.
“Hallamos especialmente descorazonador e inconsistente que la CELAC decidió aceptar, sin cuestionar, las acciones represivas del país anfitrión para privar a sus ciudadanos de expresar pacíficamente sus aspiraciones democráticas”, afirmó.
Washington reiteró además sus críticas por las denuncias de acosos y arrestos contra disidentes en Cuba, particularmente durante la cita presidencial regional.
Justamente el miércoles Estados Unidos animó a los líderes latinoamericanos que estaban en la cumbre de la Celac a reunirse con opositores cubanos durante su presencia en la isla.
El único caso fue el del presidente de Chile, Sebastián Piñera, quien se reunió en la capital cubana con la líder de las Damas de Blanco, Berta Soler.
Por su parte, diplomáticos de Costa Rica recibieron en su embajada al disidente Elizardo Sánchez y a otra activista.
“Urgimos a los miembros de la Celac a demostrar claramente su apoyo a la concentración pacífica y la libertad de expresión en las Américas”, reiteró este jueves el portavoz de la diplomacia estadounidense.