La escudería de Fórmula 1 Red Bull desveló este martes en el circuito español de Jerez (Andalucía, sur del país) su nuevo monoplaza, el RB10 con motor Renault, que a continuación fue guardado en el garaje para que los mecánicos del equipo continuaran con su puesta a punto.

Llama la atención en el nuevo monoplaza su parte delantera, que se asemeja a la quilla de un barco. La comparación gana enteros conociendo la afición por la Copa América de Vela de su creador, el genial ingeniero inglés Adrian Newey.

“Hemos hecho un esfuerzo hercúleo para que el coche esté listo hoy”, dijo Christian Horner, director de la escudería, en el ‘paddock’ del circuito andaluz.

Su equipo de ingenieros, con retraso “por un pequeño problema técnico”, continuó trabajando tras la presentación para que el alemán Sebastian Vettel, campeón del mundo los últimos cuatro años, diera las primeras vuelta al circuito.

Como todos los monoplazas de la temporada 2014, el RB10 está dotado de un nuevo motor V6 turbo híbrido de 1,6 litros de cilindrada.

“La adaptación de este motor al chasis es un reto enorme para nuestros ingenieros”, añadió Horner, que consideró que el cambio de reglamentación técnica ha llegado “en el peor momento” para la Fórmula 1, ya que va a aumentar los costes entre “un 20% y un 25%”.

El jefe de la escudería campeona del mundo reconoció que Red Bull marcha con retraso con respecto a Mercedes. “Nuestro coche pasó el ‘crash test’ hace sólo diez días”, dijo.

El campeonato del mundo 2014 comienza el 16 de marzo en Melbourne, con el Gran Premio de Australia.

“No quedan más que once días y medio de ensayos”, recordó Horner. Tras las cuatro jornadas de entrenamiento en España de esta semana, habrá dos sesiones de cuatro días en Bahréin (19-22 de febrero y 27-2 de marzo).