La Corte de Apelaciones de Concepción rechazó la paralización de la termoeléctrica Bocamina II, pero dio un plazo de cinco días a Endesa para responder a la denuncia sobre el incumplimiento del fallo de la Corte Suprema, que el año pasado ordenó un Estudio de Impacto Ambiental (EIA) a la optimización de la planta.

A pesar de todos los antecedentes aportados en la solicitud, como el informe de la Superintendencia del Medio Ambiente, que confirmó la inexistencia de una Resolución de Calificación Ambiental, y el fallo de la Corte Suprema, que el año pasado decretó que Endesa debía realizar un EIA, el tribunal de alzada penquista nuevamente rechazó la clausura de la cuestionada planta.

Respecto del apercibimiento para que la generadora cumpla con la sentencia, la Primera Sala de la Corte de Apelaciones resolvió otorgar un plazo de 5 días para que Endesa informe sobre la denuncia.

Para la abogada Paula Villegas, quien representa a pescadores artesanales y vecinos de Coronel, es inexplicable que para los ministros no sean suficientes los pronunciamientos de organismos estatales que confirman la ilegalidad en la que opera Bocamina II.

Por eso, adelantó la profesional, no esperará a los descargos de Endesa e insistirá con un recurso de reposición para insistir en la paralización de la central.

En el intertanto, la Corte deberá analizar una segunda petición para detener el funcionamiento de la termoeléctrica, la que fue presentada por el abogado Sebastián Inostroza, por algueras y pescadores de Coronel.