Cornelio Westenenk, Decano de la Facultad de Educación de la Universidad Mayor, fue elegido como el presidente de la Asociación que reúne a los Decanos y Directores de Escuelas de Educación de 16 universidades privadas del país. El nuevo representante tiene como misión poner en la discusión pública las principales preocupaciones de la entidad y convertirla en un actor clave en temas de agenda, como el Proyecto de Ley de Carrera Docente y la efectividad de la Prueba Inicia.

Durante el último encuentro, que se efectuó el pasado 26 de septiembre en dependencias de la Universidad Mayor, las autoridades académicas de los planteles expresaron su preocupación por este proyecto de ley, el que a su parecer, tiene varias deficiencias que deben ser revisadas. “Es necesario que esta iniciativa tenga una mirada más integral de la formación docente, este contextualizado con la realidad nacional, considere la problemática de las regiones y de las especialidades educativas, y se ejecute sobre un adecuado sustento académico que valide las propuestas”, sostuvieron.

El recién asumido presidente, asegura que los beneficios del proyecto “son insuficientes para lograr atraer y retener a los mejores docentes”.

Westenenk agrega que la Asociación mira con inquietud la facilidad que otorga el proyecto a que profesionales de otras disciplinas puedan ejercer como profesores de enseñanza media, estableciendo menores exigencias a las que deberán cumplir los egresados de pedagogía. “Hay una subvaloración del rol pedagógico del profesor que aspiramos se pueda reconsiderar”.

Asimismo, asegura que tampoco se reconocen las diferencias de fondo que existen entre los requisitos de formación de una educadora de párvulos, de un profesor de educación básica o de un profesor de educación media de una disciplina específica, estableciendo para todos los mismos estándares de ingreso.

“Creemos necesario reflexionar sobre lo que significa ser un buen profesor y tomar en cuenta las habilidades socio-emocionales y el rol de la vocación como elementos centrales para predecir las competencias docentes”, explica el decano de la U. Mayor.

Prueba Inicia

Otra de las preocupaciones de la Agrupación es el rol que se le ha asignado a la prueba INICIA. Westenenk explica que sus resultados deben ser interpretados con más cuidado y entendidos en el contexto de lo que fue su desarrollo e implementación. “La evaluación del año 2012 fue aplicada en abril de 2013, meses después que los estudiantes egresaran de sus respectivas universidades y con modificaciones de fechas y sedes, esto causó desconcierto y descoordinación”, señala.

Agrega que les parece positivo que exista un Examen Inicial de Conocimiento y Habilidades Docentes, como plantea el proyecto de Ley, pero “la actual prueba INICIA es un instrumento que puede y debe ser mejorado, especialmente respecto a la medición de las competencias pedagógicas y la necesaria información y transparencia de estos procesos”, sostiene.

Westenenk puntualiza que como Agrupación esperan poder reunirse a la brevedad con la Ministra de Educación, Carolina Schmidt, para poder plantearle la preocupación de que este examen sea auditado cada cinco años. “Solicitamos que esta medida se aplique en forma inmediata, permitiendo la revisión del último proceso, de forma de contribuir a perfeccionar la evaluación que se rendirá el año 2014 en un clima de mayor transparencia y confianza”.