Más de 40 mil personas han comprado sus entradas para el concierto que Andre Rieu dará en Santiago los días 30 y 31 de mayo y 1 y 2 de junio, en el Movistar Arena. El violinista batió el record para las entradas más caras para asistir a un concierto masivo en Chile, ya que la más cara sale 690 mil pesos para las localidades Diamante.

Con cerca de 30 millones de discos vendidos, este violinista ha sido acreedor de distintos premios y reconocimientos, a lo largo de su carrera, entre los que se destaca el Brit Award de música clásica, donde fue distinguido como mejor álbum del año con “Moonlight Serenade”.

Nació el 01 de octubre de 1949 en Maastricht (Holanda) y aprendió violín a la edad de cinco años, haciendo gala de un potencial enorme en la práctica de este instrumento. En 1967 sigue su formación musical en el Conservatorio de Música de Maastricht hasta en 1973. Posteriormente se dedicó a estudiar en el conservatorio de Bruselas, desde 1974 a 1977.
Inició su carrera musical siendo niño y perteneció a diversas orquestas hasta que en 1987 fundó la propia, con el nombre neerlandés de «Johann Strauss Orkest» y a partir del año siguiente empezó su fulgurante carrera de éxitos por todo el mundo , comenzando por su propia patria, y convirtiéndose en una de las grandes estrellas de la música a nivel de los más prestigiosos divos del pop o del rock, al tiempo que ganó multitud de adeptos y aficionados a su música.

Con su característico estilo de difundir la música clásica, que otrora parecía reservada a las clases de élite o acomodadas, André Rieu decidió ponerla al servicio de un público joven y en aquellos lugares que dichos jóvenes suelen frecuentar, tales como plazas públicas, estadios deportivos u otros, bien sean de ocio o culturales. Y lo consiguió con gran éxito, convirtiéndose en uno de los artistas de música clásica mas transversales de nuestros tiempos.

Los espectáculos que suelen abrir con la marcha 76 Trombones y cerrar con la Canción de cuna de Brahms. Rieu modifica sus temas para que tengan impacto en un estadio, como tocar los valses de Strauss en una octava más alta en su violín y duplicando las partes de viento. Dirige su orquesta y cantantes mientras toca su instrumento, un Stradivarius de 1732.