Un nuevo invierno en campamentos deberá enfrentar el nuevo delegado de aldeas que reemplazó a Felipe Kast en el Gobierno. Tumbes será el último asentamiento en conseguir salida a un nuevo proyecto habitacional. Pese a eso; con esperanza y respaldo, los dirigentes vecinales dieron la bienvenida a Matías Claro.

Difícil será enfrentar el último período de erradicación de aldeas post terremoto que llegaron a 87 en el Bío Bío en el momento más álgido de la crisis y la catástrofe. Actualmente quedan 37, y durante el primer semestre de 2013 deberían tener proyecto habitacional concreto más del 95% de ellas.

Matías Claro, asumió así el desafío de reemplazar a Felipe Kast como delegado de aldeas y campamentos del Gobierno.

Con palabras de despedida para Kast y bienvenida para Claro, Claudia González, dirigenta de la aldea El Esfuerzo de Dichato comprometió el trabajo conjunto, y disposición de los damnificados para salir adelante junto a las autoridades.

La revisión de los plazos dio cuenta de retrasos en Tumbes, con un proyecto difícil según reconocen los vecinos, que comprensivos deberán pasar un nuevo invierno en aldeas, porque las 200 familias en esta situación tampoco están dispuestas a utilizar el subsidio de arriendo, según explicó Liliana Bastidas, dirigenta del campamento.

Matías Claro, asumió el escenario y manifestó su disposición a estrechar los lazos y prestar respaldo a cada uno de los requerimientos de los damnificados.

El ministro de Vivienda Rodrigo Pérez, presentó al delegado en la zona, y expresó el trabajo estrecho de éste con la cartera.

Además de las aldeas, el trabajo de Claro también deberá apuntar a la solución para a lo menos la mitad de las 5 mil familias que viven en campamentos históricos, según el mismo comprometió en la zona.