Una oferta de alto valor agregado, que permita a la industria ser más competitiva y rentable, busca generar el Consorcio Apícola. Tras cuatro años de trabajo, los esfuerzos se concentran en innovar, desarrollando soluciones tecnológicas, alimentos premium, productos farmacéuticos, biopesticidas, biocontroladores y envases activos.

Así lo dio a conocer su presidente, Alexis Ruiz, en la presentación que realizó en el marco del 8º Encuentro de Ciencia y Tecnología Apícola que se llevó a cabo esta semana en Santiago y que congregó a más de 300 asistentes en cada una de sus jornadas. La actividad fue organizada por la Fundación para la Innovación Agraria (FIA), el Consorcio Apícola y la Universidad Mayor.

El Consorcio —que inició operaciones en 2008, con recursos del Fondo de Innovación para la Competitividad (FIC), entregados a través de FIA— tiene por objetivo desarrollar y transferir tecnología que permita agregar valor a los productos desde y para la colmena. Actualmente está integrado por las universidades Austral y Mayor, Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA), Cooperativa Apicoop, Colmenares Ralún, Colmenares Müller, Pharmagro, Apicap Chile y personas naturales.

Según explicó Ruiz, a partir de las materias primas (miel, propóleo, polen y jalea real), se ha trabajado en crear valor e innovaciones que permitan posicionar los productos chilenos en el mercado mundial. En este contexto, se están invirtiendo $517 millones en generar oferta en cuatro líneas: insumos agrícolas, Tecnologías de la Información y Comunicación (TICs), aplicaciones industriales e industria farmacéutica.

En lo que se refiere a insumos agrícolas, se trabaja en el desarrollo de un biopesticida de propóleo para uso en la agricultura tradicional y orgánica. Se trata de un producto no contaminante, sin período de carencia, que no genera residuos tóxicos ni resistencia en patógenos.

También se está avanzando en un biocontrolador de Loque americana, producto comercial que permitirá controlar esta enfermedad que afecta a la apicultura sin comprometer la inocuidad de la colmena.

En el ámbito tecnológico, la “estrella” del Consorcio es Beerecord, primera aplicación telefónica para celulares con sistema operativo Android a nivel mundial, que permite llevar registros de apiarios y colmenas, mediante la captura de voz del apicultor, generando reportes que pueden almacenarse en el teléfono o exportarse por correo electrónico.

Respecto a innovación industrial, Ruiz destacó los avances que realiza el consorcio para crear envases activos. “Se trata de un plástico antimicrobiano —explicó— que tendrá en su contenido propóleo nacional. Este tipo de material es altamente cotizado por la industria alimentaria, ya que permite el acceso de productos frescos a mercados distantes, al aumentar la vida útil de éstos”.

Un nicho que también se está explorando es el de generar una oferta para la industria farmacéutica. En lo concreto, se está trabajando en dos prototipos: un formulado preventivo de mastitis en vacas lecheras, que es una solución antiséptica a partir de productos de la colmena, y productos cicatrizantes de heridas crónicas en humanos.

Asimismo, se están elaborando alimentos premium para abejas, con ingredientes inocuos que aseguren el acceso a mercados internacionales.

“En un año más esperamos tener disponible en el mercado nuestra oferta de alimentos y el formulado preventivo de mastitis. Los otros productos, debieran estar listos en un plazo de entre 2 y 4 años”, adelantó Ruiz.

En total, la oferta que está creando el Consorcio accederá a un mercado internacional estimado en unos US$ 255.000 millones y nacional de US$123 millones anuales, siendo los más relevantes en monto los correspondientes a envases activos e industria farmacéutica.