Los líderes de la OTAN aprobaron el lunes los planes para entregar el mando operativo a las fuerzas afganas a mediados de 2013, para completar la retirada de las tropas extranjeras a finales de 2014, según una declaración conjunta.

Después de 2014 sólo quedará en Afganistán una misión de entrenamiento, casi trece años después del inicio de la guerra.