A raíz de la denuncia que dejó en evidencia la situación precaria en que vivían dos mujeres por incumplimientos en la construcción de sus viviendas de parte del Serviu en el sector de Puertas Negras, la directora de la entidad se comprometió a entregarles sus casas en no más de dos meses.

El caso despertó la alerta de la comunidad porteña luego que Nolfa Manríquez de 87 años de edad y María Brito de 67, pertenecientes al comité Nueva Esperanza, relataran su compleja situación: una vive de allegada y su compañera habita a un costado de su casa demolida.

La directora del Serviu, María Francisca Cruz, explicó que hubo falta de coordinación con la empresa constructora, por lo que lamentó la situación, pero señaló que en NO más de dos meses se entregarán sus casas.

Las vecinas que esperan por sus viviendas vivirán por ahora en casas modulares, debido a que sus hogares presentaron deficiencias en su estructura y sufrieron severos daños por el terremoto.