Un estudio realizado a sobre 20 mil estudiantes de enseñanza básica en Estados Unidos demostró que los niños que asisten a establecimientos educacionales donde venden comida chatarra no superan en peso a aquellos que asisten a colegios donde no se comercializan estos productos.

Según consigna Yahoo! News, dicho estudio fue publicado en “Sociology of Education” y contradice las investigaciones anteriores realizadas con un universo muestral menor.

Lo sorprendente de este estudio, es que reveló que los niños realmente no tienen mucho tiempo para comer en la escuela, por lo que es más importante lo que consumen fuera de ella.

Otra cosa que dejó en evidencia este sondeo realizado en Estados Unidos, fue que en la mayoría de los colegios se vende comida chatarra, especialmente en los recintos que cuentan con un alto porcentaje de estudiantes de bajos recursos.

En algunos estados se tomó la decisión de disminuir la venta de gaseosas y otros productos, ofreciendo en su lugar jugos y frutas frescas, situación que al parecer no ha contribuido a disminuir los niveles de obesidad.