Con la mente puesta en demostrar quién es el mejor jugador del mundo en la actualidad, más allá de la clasificación de la ATP, el serbio Novak Djokovic y el español Rafael Nadal se enfrentarán el lunes en la final del Abierto de tenis de Estados Unidos de 2011.

Djokovic, número uno mundial, saldrá a la cancha central de Flushing Meadows con ganas de desquitarse de su derrota en la final del pasado año, cuando Nadal le vapuleó en cuatro sets para llevarse su primera corona neoyorquina.

El español, que perdió la posición cimera del ranking tras el Gran Slam de Wimbledon, llega a este tope con intenciones de frenar la racha perdedora de esta temporada ante el serbio.

Cinco veces vencido por Djokovic en cinco finales de este año y en tres superficies diferentes, Nadal tiene ahora la reivindicación al alcance de su poderosa mano zurda.

“El haber ganado los últimos cinco partidos es una ventaja para Novak. Evidentemente, es el favorito en la final”, dijo Nadal, y con lógica oportunista agrega: “En el partido del lunes no soy favorito y eso te quita una cantidad de presión extra”.

Sin embargo, Nadal está comprometido a demostrar que aún tiene el tenis suficiente para dominar al ‘Nole’, que desde que arrancó la temporada ganando el Abierto de Australia ha ensartado una racha de 63 victorias y sólo dos derrotas, y 9 títulos ganados.

“Si juego bien con mi ‘topspin’ de derecha sobre su revés, debería tener la ventaja”, señaló Nadal, y agregó que parte de su preparación para el encuentro ha sido repasar el video de la final del 2010 en el US Open.

“No estoy satisfecho con mi actuación contra Novak mentalmente este año”, dijo.

“Tengo que creer en mi juego, ser agresivo y ser perfecto en todo momento, pero no siempre lo he hecho este año. Es natural. Soy un ser humano y me entran dudas”, subrayó el tenista español.

Montado sobre su sensacional éxito ante el suizo Roger Federer en las semifinales, ‘Djoko’ llega con una gran dosis de confianza para aspirar a un tercer título de Gran Slam este año, y por primera vez en Nueva York, después de fracasar en las finales de 2007 y 2010.

Ante el pentacampeón Fededer, Djokovic salvó dos puntos de partido y le dio la vuelta al encuentro para llevarse la victoria que lo sitúa en su sexta final del año ante Nadal, todas en torneos Majors.

El serbio abrió la racha ganándole a Nadal cuatro Masters 1000 seguidos: los de Indian Wells y Miami, ambos sobre cemento; seguido por los de Madrid y Roma, en arcilla, y remató con un golpe en cuatro sets en el Gran Slam de Wimbledon, sobre pasto.

“Sé que tengo la calidad del juego para vencer a Rafa. Ya lo he probado este año en tres superficies diferentes”, señala el serbio de 24 años. “Creo que tengo una buena oportunidad el lunes, pero será duro, porque estamos hablando de un jugador que tiene 10 títulos de Gran Slam con sólo 25 años (de edad)”.

En las semifinales del sábado, Nadal dispuso del escocés Andy Murray (N.4) con parciales de 6-4, 6-2, 3-6, 6-2, y Djokovic despachó a Federer por 6-7 (7/9), 4-6, 6-3, 6-2, 7-5.

Nadal buscará el lunes el undécimo título de Gran Slam de su carrera, y el segundo del año después del Roland Garros. Para Djokovic, será la oportunidad de conseguir su tercera corona de un Major este año, después de los Abiertos de Australia y Wimbledon.

Será el 28º encuentro entre Nadal y Djokovic. El mano a mano es liderado por el español 16-12.