El estado de salud del ex presidente egipcio Hosni Mubarak, en detención provisional en el hospital de Sharm El Sheij, en el Mar Rojo, no permite aún su traslado a una prisión, anunció el martes la fiscalía general.

El ex jefe de Estado, hospitalizado desde el 13 de abril después de sufrir un malestar cardiaco durante un interrogatorio, debe ser juzgado por la muerte de manifestantes durante la revuelta que provocó su caída el 11 de febrero y por enriquecimiento ilegal.

“Después de haber consultado el expediente médico (de Mubarak) y de haberlo examinado de nuevo y evaluado el hospital de la prisión de Tora (en El Cairo), el equipo decidió por el momento no trasladar al paciente fuera del hospital internacional de Sharm El Sheij”, indicó la fiscalía en un comunicado publicado en su página oficial en Facebook.