El portavoz del gobierno libio, Musa Ibrahim, indicó la noche del lunes que régimen hace “todo lo que puede” para ayudar a la población de Misrata, una ciudad rebelde a 200 km al este de Trípoli.

“El gobierno está haciendo todo lo que puede por la población de Misrata”, declaró Ibrahim en una conferencia de prensa.

El funcionario dijo que el gobierno dio su acuerdo el domingo para que un barco humanitario turco se dirija a Misrata, sitiada por las fuerzas del coronel Muamar Gadafi durante más de un mes y medio.

Ibrahim recordó que su gobierno ha autorizado la apertura de una oficina del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) en Trípoli, para que pueda acceder a Misrata, y que invitó al Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF ) para ayudar a los niños de la ciudad.

UNICEF pidió el lunes el fin del asedio de Misrata, donde cada vez más niños son víctimas de los combates, según la agencia de la ONU, según la cual al menos 20 niños, incluyendo uno de nueve meses, han muerto en la ciudad.

El portavoz indicó por otro lado que el gobierno libio ha hecho un llamado a la Media Luna Roja para evacuar a 120 niños “retenidos” por los insurgentes en un orfanato de la ciudad.

Ibrahim negó las acusaciones de organizaciones de derechos humanos que acusan a las fuerzas leales al coronel Muamar Gadafi de reprimir en forma sangrienta una ola de protestas sin precedentes contra el régimen.

Agregó que Libia esperaba, el 20 de abril, la llegada de una comisión investigadora del Consejo de Derechos Humanos de la ONU para investigar en particular el uso de mercenarios extranjeros, los bombardeos de la población y la muerte de civiles durante manifestaciones pacíficas.

“Estamos perfectamente listos para demostrar nuestra inocencia”, dijo