Los vecinos de los edificios de Villa Futuro en Chiguayante asegura que no han recibido propuestas nuevas y la salud ya está decayendo. Esto a una semana de iniciar la huelga de hambre.

La huelga que comenzó el pasado 16 de febrero en la sede comunitaria del sector Leonera, tiene a 11 personas protestando por los problemas habitacionales que enfrentan.

Por 9 millones de pesos, los vecinos de Villa Futuro fueron expropiados de sus viviendas, las que resultaron gravemente dañadas tras el terremoto, un monto que no alcanza para comprar una nueva propiedad. Así lo explicó Jorge Cartes.

Cartes agregó que el lunes pasado recibieron una segunda visita de autoridades del Serviu, quienes no llevaron propuestas nuevas, e insistieron en otorgarles un subsidio para comprar casas usadas. Sin embargo, según el dirigente, hay más de 180 familias que ya lo recibieron y aún no encuentran una vivienda.

Julia Lillo, quien también ayuna, aseguró que si bien la salud está empeorando por la falta de alimento, el ánimo se mantiene.

Los 11 vecinos están recibiendo vistas médicas a diario. Y aseguran que mientras tengan la fuerza, seguirán demandando lo que consideran lo mínimo, una vivienda digna.