Una de las personas que resultó herida durante el atentado del 24 de enero en el aeropuerto de Moscú murió, por lo que el saldo de muertos asciende a 37, indicó el jueves el ministerio ruso de Salud.

“Uno de los heridos pereció. Se encontraba en un estado grave desde que ocurrió el atentado”, precisó la ministra Tatiana Golikova, según la agencia RIA Novosti, quien elevó de 36 a 37 el número de las víctimas del atentado.

Por otra parte, 19 de las 193 personas heridas en el atentado suicida continúan hospitalizadas, según la misma fuente.

El atentado suicida ocurrido en la sala de llegadas internacionales del aeropuerto Domodedovo el 24 de enero fue reivindicado por el checheno Doku Umarov, jefe de la rebelión islamista que desgarra el Cáucaso ruso.

Después de la primera guerra de Chechenia (1994-1996), en la que se enfrentaron las fuerzas armadas rusas y las independentistas, la rebelión se islamizó progresivamente y ha traspasado cada vez más las fronteras chechenas.

La rebelión es hoy un movimiento islamista armado que permanece activo en todo el Cáucaso del norte.