Unas 27.500 unidades de fuegos artificiales fueron decomisadas por carabineros tras un patrullaje preventivo en el tradicional barrio Meiggs. Los detenidos, que exponen la salud principalmente de menores de edad, solo arriesgan una multa.

Carabineros de la Segunda comisaría sorprendieron a dos personas en la esquina de las calles Conferencia y Sazié concretando la venta de estos elementos ilegales.

El mayor de carabineros Eduardo Grandón indicó que los fuegos artificiales incautados fueron avaluados en $16 millones.

Los imputados fueron detenidos pero posteriormente quedaron solo citados a los juzgados de policía local por infringir el artículo 2 de la Ley de Control de Armas y Explosivos.

La incautación de estos 27.500 fuegos artificiales se suma a los 11.000 decomisados del pasado día viernes también en el barrio Meiggs.

Según las cifras de la Corporación de Ayuda al Niño Quemado, Coaniquem, el 2009 fueron trece los niños que sufrieron accidentes por la manipulación de estos artefactos, la mayoría en promedio de edad de entre 6 y 13 años.