Con el objetivo de proyectar los posibles escenarios que se pueden producir en los próximos meses y adoptar medidas ante la situación de escasez hídrica que vive la Región de Valparaíso, la Comisión de Control de Gestión y Fiscalización del Consejo Regional (CORE) acordó generar una Mesa Regional de trabajo.

Ésta será integrada por este cuerpo colegiado además del Ejecutivo, las seremías de Obras Públicas y Agricultura, la Oficina Regional de Emergencias (OREMI), la Dirección de Obras Hidráulicas (DOH), la Dirección General de Aguas (DGA) e INDAP.

Así lo informó el presidente de la Comisión de Control de Gestión y Fiscalización, Antonio Ayala Abarca, quien además anunció que “solicitaremos al Intendente, Raúl Celis Montt, que se declare a la Región de Valparaíso como Zona de Escasez Hídrica, para que así se puedan generar los recursos para ir en ayuda de los sectores más carenciados, previendo de esta manera los nocivos efectos ante una probable emergencia”.

Tras escuchar en la comisión, la información entregada por los distintos servicios relacionados con la materia, “quedó claramente establecido que existe un gran déficit de nieve en la cordillera, en comparación con los años anteriores, lo que hace predecible una futura sequía durante el 2011”, señaló Ayala.

En tanto, para hacer frente a los efectos que se registrarían en la agricultura, se hará uso de la batería de pozos existentes en las zonas de Aconcagua y Petorca, conduciendo el agua hacia los ríos y de allí destinarla a la distribución en las zonas rurales.

Se calcula que el costo de la inversión necesaria para ello bordea los $ 3.000 millones, los que se desglosan en la adquisición de bombas de una gran capacidad para realizar la extracción del agua desde los pozos, teniendo un especial control y seguimiento de no deprimir más las napas que puedan significar un perjuicio a los derechos de agua adquiridos por Esval para el suministro de consumo humano.