En prisión preventiva quedó uno de los 3 funcionarios públicos, implicados en el hurto y posterior venta de viviendas de emergencia, sacadas en forma ilícita desde las bodegas de Fitál en Talca, las que estaban destinadas a damnificados por el terremoto.

Imagen: Miguel García

Imagen: Miguel García

Según lo esgrimido por el fiscal jefe de Talca, Oscar Salgado, se trata de un funcionario de 39 años identificado con las iniciales J.E.M., quien fue formalizado por el delito de malversación de caudales públicos y falsificación de instrumento privado mercantil.

El hombre que se desempeñaba como chofer del Gobierno Regional del Maule, quedó recluido en la cárcel de Talca, hasta el término de la investigación fijada en 3 meses.

Por su parte, el funcionario municipal individualizado como C.M.O. de 35 años, fue formalizado por dos delitos de hurto, quedando libre con medidas cautelares de arresto domiciliario desde las 22:00 y hasta las 07:00 horas de la mañana, arraigo nacional y firma semanal en la fiscalía de Talca.

En tanto, el funcionario de Gendarmería, M.P.P, se le atribuye el delito de receptación, luego que se estableciera, que una de las mediaguas sustraídas, la adquiriera en 150.000 pesos a otro de los involucrados, para posteriormente entregarla a una hermana en la zona de Cabrero, en la Región del Bío-Bío.

El fiscal de Talca, Oscar Salgado, se mostró satisfecho por la formalización realizada por el Ministerio Público. “También estoy satisfecho, con que la Municipalidad y los entes públicos hayan dado credibilidad a la denuncia, y se haya podido acreditar que efectivamente habían personas que se encontraban lucrando con la desgracia”.

Por otro lado, una querella criminal contra quienes resulten responsables, ya había presentado el intendente del Maule Rodrigo Galilea, a la que hoy, también sumaron los consejeros regionales Alexis Sepúlveda y Rodrigo Sepúlveda.

La investigación intenta establecer responsabilidades de terceras personas, en la venta ilícita de viviendas de emergencia, y la ubicación de unas 28 mediaguas, que desaparecieron desde las bodegas municipales, lo cual motivó la investigación y denuncia de la Municipalidad de Talca.