Empresarios del transporte público están teniendo inconvenientes para que el Gobierno les cancele la subvención que permitió una rebaja sustancial de la tarifa de la locomoción colectiva en el Gran Concepción.
El 22 de marzo se firmó el convenio entre el Ministerio de Transportes y las distintas asociaciones de taxibuses de la zona y se hizo de inmediato efectiva la baja del costo del pasaje, de 420 a 340 pesos en la mayoría de los casos.
La subvención a la locomoción quedó fijada en 90 pesos por boleto, y el primer pago iba a concretarse 10 días después del acuerdo, pero no ocurrió así. El pago se ha ido atrasando y los empresarios más pequeños del rubro son quienes se ven afectados.
La línea Nueva Sotrapel cuenta con 38 máquinas y sus directivos piden al ministerio acelerar los pagos porque a la fecha sólo les han cancelado marzo y les deben unos 13 millones, según indicó el presidente de la empresa, Héctor Rodríguez.
Consultado por la demora en los pagos, el Seremi de Transportes, Santiago Cassinelli, reconoció que ha sido engorroso reunir los informes que se requiere para cancelar.
El seremi explicó que cada 3 meses debe renovarse los poderes de cada uno de los representantes legales y los abonos se hacen directamente a las cuentas corrientes de los empresarios. Asegura que a la fecha el subsidio del mes de abril ya se ha cancelado a algunos empresarios.
