Un total de 22 personas fueron asesinadas entre el viernes y este sábado en los estados fronterizos de Chihuahua y Baja California (norte de México), los más afectados por la violencia de los cárteles narcotraficantes, informaron autoridades estatales.
Entre las víctimas están dos hombres que fueron decapitados y una mujer acribillada por un comando armado que también hirió de bala a su hijo de cinco años y a otras cuatro personas.
En la fronteriza Ciudad Juárez se encontró “el cuerpo de un hombre decapitado de aproximadamente 30 a 35 años al que colocaron un narcomensaje amenazante”, reportó la Subprocuraduría de Justicia del estado de Chihuahua.
En otro punto de esa zona, limítrofe con El Paso (Texas, EEUU), fue hallado otro cadáver descabezado también con un mensaje.
Doce personas más, entre ellas tres mujeres, también fueron asesinadas en Ciudad Juárez, la localidad más violenta de México con más de 2.500 homicidios en 2009 a pesar de la presencia de unos 6.000 militares.
En otros puntos del estado de Chihuahua se perpetraron siete asesinatos, reportó la Procuraduría.
Por otra parte, una mujer murió el viernes y cinco personas fueron heridas, entre ellas un niño y dos mujeres, en la fronteriza Tijuana (Baja California) a manos de un comando armado cuando observaban los daños en una vivienda de una exclusiva zona residencial que había sido acribillada un día antes.
“El jueves por la noche un grupo armado hizo múltiples disparos de metralleta a una vivienda, sólo causando daños sin herir a nadie. Pero ayer (viernes) por la tarde regresaron de nuevo y atacaron a la gente”, dijo a la AFP José Manuel Yépiz, vocero de la Procuraduría de Justicia estatal.
Los 5 heridos se encuentran estables, añadió.
Las autoridades atribuyen la ola de violencia en el norte de México a un enfrentamiento entre cárteles por el control de las rutas de droga hacia Estados Unidos, que ha causado en todo el territorio más de 15.000 homicidios en los últimos 3 años a pesar de un despliegue militar de casi 50.000 soldados.