La mañana del 26 de abril de 1999 fue, para todo el pueblo británico, una de aquellas que cuesta olvidar. Ese día la “chica de oro” de la televisión inglesa, Jill Dando, fue encontrada muerta en la puerta de su hogar, con una mortal herida de bala en la cabeza y las llaves de su BMW convertible aún en la mano.
Tras su frío crimen, la búsqueda del agresor de la periodista estrella de la BBC se convertiría en la investigación criminal más grande realizada por la Policía Metropolitana, desde aquella vinculada al ‘Destripador de Yorkshire’ a fines de los ’70.
En específico, la investigación implicaría la toma de cientos de declaraciones, el rastreo de una suma superior a los mil 200 vehículos y el análisis de sobre 2 mil sospechosos. Incluso hubo un juicio contra uno de los posibles culpables, el cual posteriormente apeló a su condena, fue nuevamente llevado a juicio y luego absuelto de los cargos.
Con todo ello, lo cierto es que a más de 20 años del crudo asesinato de Jill Dando, nadie sabe con certeza quién mató a la recordada presentadora de la British Broadcasting Corporation.
La vida de Dando
Jill Wendy Dando nació el 9 de noviembre de 1961 en la ciudad de Weston-super-Mare en el condado de Somerset, Inglaterra.
Desde joven, se destacó como una estudiante sobresaliente y motivada, encontrando desde temprano una predilección por las comunicaciones. Algo que pudo estar motivado por su hermano mayor, Nigel, quien también se desempeñó como periodista de la BBC en Bristol hasta su retiro en 2017.
En sus veinte, Dando debió enfrentar la temprana muerte de su madre, Winifred Mary Jean Hockey, quien murió de leucemia a los 57 años.
Años antes, cuando Dando tenía sólo tres, la familia ya había recibido una dura noticia de salud, luego que a Jill se le descubriera un agujero en el corazón y un bloqueo en una arteria pulmonar, lo que la obligó a someterse a una delicada cirugía a temprana edad.
Su carrera
Tras estudiar periodismo en el Instituto South Glamorgan de Cardiff, Dando encontró su primer trabajo como reportera trainee para un diario local llamado Weston Mercury, donde su padre y hermano habían trabajado previamente.
Tras cinco años, comenzó su carrera en la BBC de Devon en 1985. Luego, ese mismo año, fue transferida a la sede de South West, donde presentó el programa de noticias regionales Spotlight South West.
Tras otros movimientos internos, en 1988 Dando fue seleccionada para integrar el equipo nacional de la BBC en Londres, donde se dedicó a dar los boletines de noticias “hora a hora” entre 1986 y mediados de los ’90.
En ese período vendría la fama nacional, siendo presentadora de diversos programas de noticias de la BBC como Breakfast Time, Breakfast News, BBC One O’Clock News y Six O’Clock News; además del show de viajes Holiday y el programa de crímenes Crimewatch, entre otros.
Al momento de su muerte, Dando era considerada una de las periodistas más célebres de la BBC, e incluso había sido elegida como Personalidad del Año de la cadena en 1997.
Su muerte
En abril de 1999, la vida le sonreía a Dando. Tras una extensa relación con el ejecutivo de la BBC Bob Wheaton, la cual se extendió entre 1989 y 1996, en diciembre del ’97 la periodista se enamoró del ginecólogo Alan Farthing, a quien conoció en una cita a ciegas programada por amigos en común.
Farthing, quien se encontraba separado al momento de conocer a Dando, esperó que su trámite de divorcio estuviera finalizado para pedirle matrimonio a la estrella. En enero de 1999, la pareja anunció su compromiso y afirmó que pisaría el altar el 25 de septiembre de ese mismo año. No obstante, su sueño quedaría truncado…
La mañana del 26 de abril de 1999, la periodista de 37 años dejó el hogar de su novio para dirigirse al suyo, ubicado en el sector de Fulham al sudoeste de Londres.
Tras bajarse de su vehículo cerca de las 11:30 horas, Dando se dirigió hacia la puerta de su casa. En ese entonces, sonó un disparo que acabó inmediatamente con su vida.
“Dando estaba a punto de poner las llaves en la cerradura para abrir la puerta principal de su casa en Fulham, cuando un desconocido la agarró por detrás. Con su brazo derecho, el asaltante la sujetó y la obligó a tirarse al suelo, de modo que su rostro casi tocaba el escalón embaldosado del porche. Luego, con su mano izquierda, le disparó un solo tiro a su sien izquierda, matándola instantáneamente. La bala entró justo por encima de su oreja, paralela al suelo, y salió por el lado derecho de su cabeza”, señaló en ese entonces Robert Woffinden, periodista de investigación que cubrió la muerte de Jill.
Catorce minutos después del asesinato Helen Doble, vecina de Dando, descubrió la macabra escena del crimen. Dio aviso a la policía y servicios de urgencia, quienes derivaron a la celebridad hasta el Hospital Charing Cross, donde fue declarada muerta a las 13:03 horas.
Primeras indagaciones y un acusado absuelto
Tras la muerte de Dando, la policía inició una frenética búsqueda para dar con el paradero del asesino. El único dato certero sobre el culpable lo dio Richard Hughes, vecino de la reportera, quien escuchó a Jill llorando “como de sorpresa, cuando uno saluda a un amigo” y luego, al acercarse a la ventana, vio al asesino alejarse: un hombre blanco de unos 1.83 metros y aproximadamente 40 años de edad, quien se alejaba a paso sereno de la casa de la periodista.
Seis meses después de la muerte de Dando, la policía había entrevistado a más de 1.500 personas y tomado más de mil declaraciones. Con pocos avances, tras un año de análisis los investigadores se centraron en Barry George, uno de los sospechosos que vivía a un kilómetro de la casa de Dando y tenía antecedentes de acoso a mujeres, delitos sexuales y otros comportamientos antisociales. El hombre fue puesto bajo vigilancia, arrestado el 25 de mayo de 2020 y acusado del asesinato de la periodista el 28 de mayo.
Tras el juicio en su contra, George fue declarado culpable y el 2 de julio de 2001 condenado a cadena perpetua. No obstante, poco después comenzaron a aparecer voces que afirmaban la inocencia del hombre y de que las pruebas en su contra eran débiles. Barry presentó dos apelaciones que fueron desestimadas, pero una emitida en noviembre de 2007 tuvo éxito y permitió un nuevo juicio, tras el cual la condena original fue anulada y el acusado absuelto en agosto de 2008.
Nuevas líneas de investigación
Tras el fracaso de la acusación contra George, la policía se centró en nuevas líneas de investigación. La primera de ellas hacía alusión a la posibilidad de que un exnovio o amante celoso haya dado muerte a Dando. No obstante, tras un chequeo al historial de llamadas de la mujer y entrevistas a sus amigos más cercanos, esta teoría fue desechada.
Luego surgió la posibilidad de que un desconocido haya contratado a un sicario para matar a la periodista, como venganza por evidencias levantadas por su programa Crimewatch. Pero tras exhaustivas indagaciones la teoría fue desestimada.
También surgió la posibilidad de que un fan trastornado haya matado a Dando luego de que ella rechazara sus acercamientos. El hermano de la reportera, Nigel, informó a los detectives que ella le había manifestado su preocupación por “un tipo que la molestaba” los días previos a su muerte, pero los detectives descartaron esto.
En este contexto, dos teorías que no fueron desechadas y se mantienen como una incógnita tienen relación con grupos serbios y con una supuesta red de pedofilia integrada por famosos.
La trama política serbia
Muchos afirman que Dando fue víctima de una trama política de carácter internacional. El 6 de abril de 1996, Jill fue la cara visible de una maratón televisiva que recaudó millones de libras para los refugiados albano-kosovares de la guerra de Kosovo.
Tres días antes de su crimen, la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) bombardeó la sede de la Radio Televisión de Serbia en Belgrado, asesinando a un total de 16 trabajadores en un solo ataque a la principal arma de propaganda de Slobodan Milosevic, expresidente serbio, en la guerra.
Como represalia, se piensa que este grupo pudo haber dado muerte a Jill. El primer hecho que probaría esta línea es que Tony Hall, compañero de la periodista, recibió una llamada apenas días después del fallecimiento de su colega en la que le señalaron: “Tu primer ministro Blair descuartizó a gente joven inocente, ahora los descuartizamos a ustedes”, con una voz que según Hall sonaba “del este”, informó el medio Cope.es.
La segunda prueba fue que a mediados de abril de 1996 un reconocido periodista opositor de Milosevic, Slavko Curuvija, fue asesinado en la puerta de su casa en Belgrado de manera idéntica a la reportera británica: de forma muy rápida y con un disparo a la cabeza. Las pruebas de balística, en tanto, demostraron que las marcas en ambos asesinatos fueron similares a las de la munición del ejército yugoslavo.
Según declaraciones de la esposa de Curuvija dadas en 2012, ella dijo creer que “hay una relación entre las dos muertes. Creo que los han ejecutado a los dos”.
La red de pedofilia VIP
Otra de las teorías más fuertes en torno a la muerte de Dando es aquella que postula que estuvo a punto de revelar la existencia de una red de pedofilia VIP, integrada por personas altamente conocidas.
Como se informó más arriba, Dando era la presentadora del programa de crónica negra especializado en destapar a criminales londinenses, Crimewatch. De acuerdo a un compañero del programa, la profesional estaba muy cerca de exponer una red de pedófilos liderados por alguien extremadamente conocido en la sociedad británica.
De acuerdo a la fuente, meses antes de su muerte la periodista presentó a los jefes de la cadena BBC un dossier que incluía pruebas contra una “personalidad VIP” que habría abusado de varios niños.
“No recuerdo los nombres de todas las estrellas involucradas, y no quiero implicar a nadie, pero Jill dijo que eran nombres asombrosamente conocidos”, mantuvo la fuente en 2014 al ser consultada por el medio inglés Daily Express.
Esta situación le habría valido una serie de amenazas anónimas, algo que preocupó a su prima Judith Dando, quien le aconsejó mudarse prontamente porque ya no estaba segura en su casa.
“Era extremadamente ingenua respecto a su seguridad, le dije en más de una ocasión que no debía mudarse sola a una casa grande y sin seguridad, que se instalase en un apartamento”, comentó Judith al medio británico Mirror en 2019.
Legado
Lo cierto es que, a más de 20 años de la muerte de la periodista, su asesinato permanece abierto y como uno de los misterios sin resolver más dolorosos de Inglaterra.
Pese a ello, la muerte de Dando no ha sido en vano y ha permitido una serie de conmemoraciones que han mejorado la vida de cientos de personas.
Tras su fallecimiento, el copresentador de Jill en la BBC, Nick Ross, propuso la formación de un instituto académico que llevara su nombre. Junto a su novio, Alan Farthing, lograron recaudar más de 1.5 millones de libras esterlinas y crear en abril de 2001 el Instituto de Ciencia Criminal Jill Dando en la Universidad de Londres.
Posteriormente, la BBC y parte de su equipo construyeron un jardín memorial usando plantas y colores significativos para la periodista, el cual fue emplazado en la localidad de Grove Park, en su natal Weston-super-Mare, y abierto al público en agosto de 2001.
Luego, la BBC creó un premio de beca en memoria de Dando, el cual permite que anualmente un alumno estudie periodismo de forma gratis en la Universidad de Falmouth.
Con ello, sus colegas, amigos y cercanos buscan que la memoria de la periodista Jill Dando permanezca presente, mientras viven con la esperanza de que el misterio de su muerte se dilucide.
