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Resumen generado con una herramienta de Inteligencia Artificial desarrollada por BioBioChile y revisado por el autor de este artículo.

En Gales, Reino Unido, un hombre de 47 años mató a su compañero de trabajo de 22 años en un violento "juego" donde se golpeaban mutuamente para ver quién resistía más, todo ello ocurrió en marzo de 2023. Jason Thomas dejó inconsciente a Liam Morgan-Whitte con un golpe que le causó una hemorragia cerebral fatal. Impulsados por el alcohol y las drogas, ambos participaron en este trágico incidente que terminó en la condena de Jason por homicidio involuntario dos años después. El juez describió el acto como "la mayor estupidez" y señaló que la combinación de alcohol y cocaína los llevó a perder todo sentido común en un juego que terminó en tragedia.

Hace dos años en Gales, Reino Unido, un hombre mató a otro luego de iniciar un “juego” que consistía en ver quién aguantaba el golpe más fuerte.

Parece una situación irreal, pero aquello pasó en marzo 2023. En ese entonces Jason Thomas tenía 47 años, Liam Morgan-Whitte, 22, y eran compañeros de trabajo.

Ambos iniciaron un violento juego cuando se encontraban en la casa de un amigo, impulsados por el alcohol y las drogas, según consigna The Sun.

El “juego” consistía en que los dos se golpearan mutuamente hasta averiguar quién resistía más. Llegó el turno de Jason quien lanzó un golpe que dejó inconsciente en el suelo a su compañero de trabajo.

Británico mató a su compañero de trabajo por desquiciado “juego” de golpes

Rápidamente Liam fue llevado a un centro asistencial, sin embargo no pudieron salvarle la vida debido a una hemorragia cerebral.

Tras el hecho y dos años después, Jason fue condenado por la muerte de su compañero por el delito de homicidio involuntario.

Al dictar sentencia, el juez Paul Thomas KC indicó que “este acto de la mayor estupidez hace dos años le costó la vida a un hombre de 22 años“.

“Este trágico suceso fue alimentado por su consumo excesivo de alcohol y cocaína, lo que le hizo perder todo sentido común. Las bromas cordiales entre ustedes dos se volvieron cada vez más competitivas y agresivas“, añadió.

“Ambos golpes que le propinó fueron con gran fuerza, suficientes para dejarlo inconsciente y luego provocarle un paro cardíaco del que nunca se recuperó”, cerró el juez tras detallar los hechos a Jason Thomas.