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Resumen generado con una herramienta de Inteligencia Artificial desarrollada por BioBioChile y revisado por el autor de este artículo.

Un incidente alarmante ocurrió en un vuelo de la aerolínea Plus Ultra que cubría la ruta entre Madrid y Caracas cuando un pasajero intentó abrir una puerta de seguridad a más de 3.000 metros de altura. Según informes, el individuo, con signos de alteración mental, agredió a otros pasajeros y a un miembro de la tripulación, siendo restringido en un asiento trasero por las azafatas. Sin embargo, logró dirigirse a otra salida de emergencia en un descuido, resultando en un altercado que provocó la fractura de un pie a uno de los implicados.

Una terrible situación se dio en un vuelo de la aerolínea Plus Ultra, que hacía el recorrido entre Madrid (España) y Caracas (Venezuela). Esto luego de un pasajero intentara abrir una de las puertas de seguridad, cuando el avión iba a más de 3.000 metros de altura.

De acuerdo a lo que expone Daily Mail, se trató de un sujeto con signos de “alteración mental”, quien agredió a otros dos viajeros y a un miembro de la tripulación.

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Según lo que expone Infobae España, el aludido fue puesto en un asiento trasero, bajo el cuidado de las azafatas, para que no generara más problemas.

No obstante, sostienen, en un descuido de las trabajadoras el hombre volvió a producir caos. Esta vez se dirigió hasta una salida de emergencia, con el objetivo de abrirla.

En ese instante de tensión, él debió ser sujetado por otros personeros de la aerolínea, además de la ayuda de dos pasajeros. Uno de los involucrados terminó con una fractura en su pie.

“Inmediatamente, nuestro personal de cabina redujo al pasajero y, siguiendo con el protocolo de actuación, lo aseguró en la parte trasera del avión hasta llegar al destino, donde fue entregado a las autoridades locales”, indicó la aerolínea en un comunicado.

“En todo momento estuvo acompañado de dos personas de la tripulación, tumbado en el suelo y atendido para evitar algún posible altercado o que se autolesionara”, agregaron.

Desde la aerolínea precisaron que, en sus naves, resulta imposible que una persona pueda abrir una puerta de emergencia a más de 3.000 metros de altura, ya que el bloqueo es automático.

“En ningún caso la seguridad del vuelo ni de quienes viajaban a bordo se vio comprometida”, concluyeron.