La semana pasada se llevaron a cabo una serie de operativos en las calles Meiggs, Garland y Campbell, en pleno casco histórico del barrio, con el objetivo de eliminar el comercio ilegal y erradicar los grupos delictuales que operan en el sector.
Estas intervenciones, llevadas a cabo por Carabineros, la Delegación Presidencial de la región Metropolitana, el Ministerio de Seguridad Pública y Dirección de Seguridad de Santiago, fiscalizaron bodegas que almacenan y distribuyen productos falsificados y de contrabando.
Luego de estos controles, se lograron incautar más de dos mil unidades en ropa y vestuario, y aproximadamente 4.100 elementos cosméticos y maquillajes.
Con esta enorme cantidad de elementos es válido realizarse la siguiente pregunta, ¿Qué sucede con estos?
¿A dónde van a parar los artículos incautados?
El abogado de la Dirección de Seguridad de la Municipalidad de Santiago, Sebastián Carreño, explicó el procedimiento, el cual inicia con estos objetos siendo transportados “en vehículos municipales, ya sean camionetas o camiones de dominio municipal, a las diferentes bodegas que posee la municipalidad”.
Allí, se almacenan “a la espera de levantar actas, se contabilizan estos productos de forma inmediata al decomiso de los productos, se guardan en bolsas selladas para que no sean productos de algún tipo de hurto por parte de ninguna persona y se reservan en las bodegas bajo resguardo de televigilancia y con candados”, señaló a Emol.
El profesional añadió que “una vez que están finalizadas estas actas, firmadas por los inspectores que estuvieron a cargo del procedimiento junto con Carabineros, se derivan todas las actas junto con los productos al Juzgado de Policía Local, que decide el destino de los elementos incautados”.
Si los bienes se destruyen, serán llevados hasta las dependencias de la municipalidad destinadas para ese proceso. “Si se trata de prendas de ropa, estas se cortan; lo mismo que sucede con los juguetes o productos cosméticos: se rompen mediante la aplicación de fuerza proporcional”, agregó.
Por otro lado, la municipalidad también puede destinar parte de estos artículos para la beneficencia, siempre y cuando así lo determine el juez de Policía Local.