Tras las recientes fiscalizaciones y desalojos de los comerciantes ilegales del Barrio Meiggs, comerciantes acusan pocas ventas tras la implementación de rejas, una medida que busca erradicar a los “toldos azules”.
A pesar de reconocer que la iniciativa ha traído más seguridad a la zona, los locatarios denuncian que sus ventas se han visto afectadas, especialmente en el sector comprendido por las calles Garland, Campbell y Exposición.
En CHV, diferentes comerciantes con locales establecidos explicaron que, si bien están de acuerdo con la medida, “han bajado muchísimo las ventas, más que todo por el cierre del portón”.
Esta medida impide el acceso rápido de las personas que transitan por las avenidas principales. Sin embargo, una comerciante admitió que la zona se ha vuelto “muchísimo más tranquila” sin la presencia de los vendedores ambulantes.
Por otra parte, una vendedora del Portal Exposición, que paga alrededor de dos millones de pesos de arriendo, explicó que con la instalación del portón, la venta “es insostenible” para ella y otros locatarios: “Mi vecina no ha vendido nada, yo he vendido tres mil pesos porque el portón -que es por donde entra la gente a comprarnos- está cerrado”.
En ese contexto, agregó que para sobrellevar esta situación “estamos vendiendo por la reja”. Además, la comerciante aclaró que, a pesar de que “se hable de los toldos azules”, la calle Garlan “era la más segura de Meiggs, acá nadie robaba (…) Era la misma gente de los toldos azules que cuidaba la gente que venía a comprar”.
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