La iniciativa, que la institución realiza cada año con el apoyo del Ministerio de Salud y Carabineros, llama a no comprar, no usar y no vender fuegos artificiales. Coaniquem advierte que el decomiso de estos, a nivel nacional, aumentó un 80% entre 2019 y 2021.

El presidente ejecutivo de la Corporación de Ayuda al Niño Quemado (Coaniquem), Jorge Rojas, junto al seremi de Salud de la región Metropolitana, Gonzalo Soto, y el prefecto de la Prefectura Santiago Occidente, coronel Rodrigo Soto; dieron inicio a la tradicional campaña “No más Fuegos Artificiales”.

La iniciativa cumple 29 años y tiene por objetivo prevenir las quemaduras durante las celebraciones de fin de año. Este 2022, la campaña adquiere aún más relevancia dado el aumento de 80% en los decomisos de estos elementos pirotécnicos.

Cada año se realiza una vigilancia epidemiológica de los casos de quemaduras por esta causa en menores de 15 años, en el periodo comprendido entre el 6 de diciembre y el 6 de enero.

Por varios años se contactó a cerca de 400 servicios de urgencia pediátricos públicos y privados a lo largo del país para que notificaran sus casos. Sin embargo, desde hace dos años se sumaron 1.200 centros de atención primaria. Esta vigilancia permite identificar la cantidad de víctimas de quemaduras por fuegos artificiales, levantar alertas si hay aumentos y medir la evolución de este problema.

Este 2022 la campaña se lanzó de forma simultánea en los centros de rehabilitación de Coaniquem de Antofagasta, Santiago y Puerto Montt. Por su parte, en Concepción, la iniciativa se dio a conocer el día 6 de diciembre.

El seremi de Salud Región Metropolitana, afirmó estar “en alerta y desde hace varios meses trabajando en un plan de fiscalización de Navidad segura y año nuevo tranquilo. Lo ideal es avanzar a tener cero casos”.

“El llamado a la ciudadanía es a denunciar por los canales formales, Carabineros, el 133, toda manipulación y todo tipo de venta de fuegos artificiales”, agregó.

Campaña preventiva de Coaniquem

La venta al público de fuegos artificiales se encuentra totalmente prohibida y puede ser denunciada por cualquier ciudadano. Las querellas van directamente a los Juzgados de Garantía. Coaniquem llama a no usar, no comprar, no vender fuegos artificiales de uso doméstico, según lo exige la Ley 19.680 promulgada en mayo del año 2000.

El coronel Rodrigo Soto comentó que “como Estado de Chile, hemos tratado de poder mejorar las medidas de control, a través de la modificación de la ley de control de armas, donde se aumentaron las penas para todo aquellos que comercialicen, vendan, porten o utilicen los fuegos de artificios”.

“Carabineros realiza planes operativos durante todo el año, pero especialmente en estas fechas tan emblemáticas, porque las personas creen que el fuego artificial es un método o un mecanismo para poder celebrar y están totalmente equivocadas”, añadió.

Según los casos reportados a la Corporación por servicios de atención en salud públicos y privados a nivel nacional, entre el 6 de diciembre de 2021 y el 6 de enero de 2022, 7 menores, entre los 6 y los 14 años de edad, resultaron quemados por fuegos artificiales.

“Vemos con preocupación que en el último año aumentó el uso de fuegos artificiales y que si durante el 2019, según datos entregados por Carabineros de Chile, se registraron 187.696 eventos de denuncias y decomisos de fuegos artificiales, en 2021 se logró decomisar 337.721 unidades de distinta especie tales como bengalas o petardos. Esto implica un aumento de 80% en el periodo”, explica el Dr. Jorge Rojas, fundador de la institución.

“Esta situación es tremendamente compleja debido al alto riesgo de lesiones de quemaduras por su uso y la posibilidad de explosiones en lugares de venta y acopio. Es nuestra responsabilidad cuidar a los niños y velar porque no sufran quemaduras. Chile es un país modelo a nivel internacional en este tema y Coaniquem lleva 43 años preocupándose de disminuir este tipo de lesiones”, complementó Rojas.