La Fiscalía del Bío Bío se encuentra investigando si es que Sandra Rizas, conductora acusada de atropellar y dar muerte al odontólogo Roberto Sutter, de 82 años, se encontraba hablando por teléfono mientras manejaba su automóvil el día del accidente.
Recordemos que el trágico hecho ocurrió hace un mes en la intersección de las calles Rafael Sotomayor y Jaime Eyzaguirre, en el sector de Lonco, por lo que los querellantes en la causa pidieron congelar los bienes de la imputada, de manera de perseguir también su responsabilidad civil.
Al respecto, el abogado que representa a la familia, Hans Laurie, sostuvo que la mujer formalizada por cuasidelito de homicidio “señaló en su declaración voluntaria que habría sido la víctima, quien habría cruzado por un paso no habilitado”.
“Hay imágenes que desmienten a la imputada. No respetó el seda al paso, tampoco el derecho preferente de paso y se investiga si al momento del atropello iba además hablando por teléfono”, añadió.
Esto fue confirmado por el fiscal Andrés Barahona, quien encargó a la SIAT de Carabineros el peritaje a las cámaras de seguridad que captaron el accidente, con el fin de establecer si es que la conductora tenía el teléfono en sus manos al momento del hecho.
“Se encuentran pendientes algunas diligencias para poder ratificar esa hipótesis por eventuales infracciones adicionales a las que denuncia Carabineros”, comentó.
“El eventual uso de un teléfono celular llevaría a respaldar aún más la hipótesis de un cuasidelito de homicidio, y en este caso por responsabilidad de la conductora y no del peatón”, añadió.
Por último, cabe mencionar la defensa de la imputada, a cargo del abogado Andrés Franchi, se excusó de hacer declaraciones.
Tras la formulación de cargos, Sandra Rozas quedó con las cautelares de firma mensual y arraigo nacional.
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