Los último peritajes que se harán al cuerpo del pequeño Tomás Bravo serán practicados por peritos forenses de Santiago, los que serán observados en vivo -vía telemática- por los peritos extranjeros convocados por la Fundación Amparo y Justicia.

La fiscal regional del Bío Bío, Marcela Cartagena, sostuvo este martes que restaban peritajes al cuerpo del menor, los que podrían ofrecer resultados diferentes a los expuestos por el informe definitivo del Servicio Médico Legal de Concepción, que atribuye el deceso del niño a hipotermia e inanición, sin señales de participación de terceros, lo contrario de la tesis de la Fiscalía.

Esa discrepancia abierta con el trabajo del SML penquista también la siente la Fundación Amparo y Justicia, que representa ahora al padre del menor, Moisés Bravo, y que inicialmente defendió a la madre, Estefanía Gutiérrez.

Por eso, la fundación solicitó a la Fiscalía Regional del Bío Bío una última pericia pero cumpliendo ciertos requisitos, uno de ellos, consistente en que ningún funcionario del servicio penquista tenga participación directa.

De hecho, fue aceptado que concurra desde Santiago la perito forense Vivian Bustos, que trabajará bajo la supervisión -vía telemática- de la doctora Carmen Cerda, destacada tanatóloga y forense.

No será la única que verá la labor de Bustos mediante una conexión telemática, porque también estarán conectados los peritos extranjeros que desde un inicio ofreció la fundación, uno en España y el otro en Estados Unidos.

Los peritos extranjeros podrán interactuar y dirigir las pericias, cuyos resultados también espera la Fiscalía, considerando que el informe histopatológico indica signos de hipoxia cerebral en el cuerpo del menor, es decir, falta de oxígeno, cuyas causas pueden ser variadas y dentro de las cuales se contempla la asfixia, algo que debe ser reevaluado.