Desde la Universidad de Los Lagos se confirmó que se realiza un catastro de los estudiantes que perdieron la gratuidad para este 2019.

Acorde a lo informado, la casa de estudios pública pretende lograr una modificación legal para aplazar las exigencias del avance curricular.

Y es que una de las causales para la pérdida del beneficio es “ir al día” con los ramos. Una exigencia que a juicio de Óscar Garrido, rector de la Universidad de Los Lagos, no responde a la realidad educativa, más aún cuando se vincula con el aspecto socioeconómico.

Si bien no quiso adelantar cifras, confirmó que se espera que se registre pérdida de la gratuidad.

Por ello es que se busca conocer la realidad de cada zona, con tal de definir la magnitud de algo, que según Garrido, es un problema y por lo cual se trabajará como universidades públicas en modificaciones legales que entreguen mayor flexibilidad.

El próximo jueves debería quedar claro la cantidad de alumnos que perdieron la gratuidad en la casa de estudio de Osorno tras los resultados arrojados por el catastro.