Los empleados defendieron la licitación por 15 millones de pesos que abrió la municipalidad para galardonar con joyas de oro a sus funcionarios. Catalogaron como "infundadas y mal intencionadas" las críticas.

La directiva en Antofagasta de la Asociación de Empleados Municipales de Chile (Asemuch) emitió una declaración pública, respecto de la cuantiosa licitación abierta por la casa edilicia de esa comuna para adquirir lujosos premios para celebrar el Día del Funcionario.

Según informó BioBioChile, la administración comunal pretende desembolsar hasta 15 millones de pesos en relojes con incrustaciones de oro, además de pulseras, cadenas y anillos del mismo metal precioso, para galardonar a sus trabajadores con más años de experiencia.

Al respecto, Alfredo Fuentes, presidente de la Asemuch en Antofagasta, catalogó como “infundadas y mal intencionadas” las críticas recibidas, pues considera que los “reconocimientos sí se deben hacer a los funcionarios, porque se lo han ganado con trabajo”.

“Hemos sido la primera línea siempre”, afirmó.

Desde el gremio agregaron que “este reconocimiento está validado plenamente a través del Decreto Ley N° 2.118 del Ministerio del Interior el año 1997, reconociendo el aporte histórico que los Funcionarios Municipales hemos entregado a una de las instituciones públicas más antiguas del país como lo son las municipalidades”.

Tal como se informó, el hecho causó la indignación del senador Pedro Araya (IND), quien acusó al alcalde suplente de Antofagasta, Ignacio Pozo, de haber recurrido al Ministerio de Educación por déficit de $3 mil millones en Educación, agregando que se dejó a pagar aguinaldo a asistentes de la educación, y que pese a ese contexto, generó una licitación para comprar joyas de oro.

“La verdad es que no se entiende nada. Por un lado, el propio Ignacio Pozo señala que hay un déficit económico en la educación municipal por $3.000 millones pesos que motivó un viaje para hablar con el ministro de dicha cartera, sumado a que no se le pagó el aguinaldo comprometido a las asistentes de la educación pero por otro lado aparece firmando licitaciones con su puño y letra para la compra de relojes de oro”, fustigó Araya.