Destacando su capacidad de gestión como punto de distinción respecto de los otros candidatos de la primaria oficialista, Jeannette Jara (PC) asumió el desafío presidencial para retornar a La Moneda. Esta vez, como la segunda mujer en ponerse la banda presidencial. Según dice, ni los votos cruzados ni el prejuicio de su militancia le generan temor ni ansiedad.
Haciendo una pausa durante un viaje de Valparaíso a Santiago, la candidata del Partido Comunista (PC), Jeannette Jara, se toma un tiempo para abordar sus principales propuestas en búsqueda de retornar a La Moneda, ya no como ministra, sino que con la banda presidencial.
El desafío inicial es la primaria oficialista, en la que la extitular del Trabajo destaca su capacidad de gestión probada como punto de distinción ante los demás candidatos. Según dice, en conversación con BioBioChile, ni los votos cruzados ni el prejuicio de su militancia le generan temor ni ansiedad.
Consultada por los principales ejes de su candidatura, Jara plantea -en orden- el crecimiento económico, los derechos sociales y la seguridad pública. En este último punto, enfatiza que el objetivo es enfrentar al narco y al crimen organizado “con más fuerza de la que se ha puesto hasta ahora”. Esto, dice, para contrarrestar el malestar de la población.
Evitando atribuirse directamente las principales reformas de la administración Boric, la carta presidencial del PC remarca que fueron logros de equipo, “pero en varios de ellos me tocó liderar y eso es un hecho de la causa”.
Por último, ante la reiterada consulta por Venezuela y Cuba, Jara dice desconocer el interés, pero advierte que podría estar relacionado con “intencionalidades” ajenas al territorio nacional, y más bien vinculadas a “cuestionamientos” a su vocación democrática que podría tener siendo comunista.
Jeannette Jara, la elegida del PC para llegar por primera vez a La Moneda
—¿Cuáles son los principales tres ejes prioritarios de su propuesta?
En primer lugar, creemos que en Chile hay que crecer más. El crecimiento debe ser sustentable medioambientalmente y junto con llegar a los sectores empresariales, tiene que llegar a la mesa de todos los chilenos (…) que avancemos desde el concepto de salario mínimo, que es el mínimo legal a pagar, es el salario vital que es el mínimo para vivir.
En el segundo eje vamos a trabajar los temas de los derechos sociales con foco en dos iniciativas en particular: El primero, acceso a la vivienda, fortaleciendo el Plan de Emergencia Habitacional y generando un subsidio preferente para jóvenes entre 25 y 35 años; y el segundo, poder disminuir los tiempos de espera en materia de salud pública, tanto para interconsulta de especialistas como para exámenes y listas de espera.
El tercer eje dice relación con la seguridad pública. Y en ese caso lo que vamos a hacer es, junto con fortalecer el enfoque social de seguridad pública a través de medidas preventivas que permitan que las niñas y los niños salgan de sus casas y no tengan que estar encerrados, vamos a fortalecer Carabineros e Investigaciones con herramientas de inteligencia policial, y además entregando una mayor dotación que permita no solo la formación de nuevos carabineros, sino que con los debidos incentivos económicos, extienda la carrera de Carabineros que hoy día jubilan a los 20 años.
—¿Considera alguna edad para extender el tiempo de carrera de las policías?
Va a depender mucho de los recursos de los que dispongamos, porque tanto Carabineros como Investigaciones tienen pensiones garantizadas en términos individuales para cada uno de ellos (…) entonces, hay que ver los recursos fiscales con los que contamos para poder hacer un esfuerzo que le signifique también a ellos una justa retribución.
—¿Quedan reformas pendientes en este gobierno y que podrían ser prioridades en una eventual administración suya?
Claro que sí. En primer lugar, me gustaría avanzar en la Ley Antidiscriminación, precisamente pensando en las comunidades de las diversidades sexo-genéricas que están expuestas a muchos niveles de violencia, bullying y ciberataques. En segundo lugar, en materia laboral, me gustaría avanzar en torno a crear la negociación colectiva ramal. En tercer lugar, creo que es muy necesario extender la línea del metro para que llegue a la comuna de Lo Espejo, que es la comuna que va quedando fuera del circuito de Metro. Y en cuarto lugar, creo que sin duda poder avanzar en la salud pública es fundamental. No sé si se va a lograr en este gobierno, pero en mi gobierno ese tema va a ser prioritario.
—¿Consideraría la ley de aborto como prioridad?
No, el foco mío en salud va a estar en los temas de reducir tiempos de espera. Si podemos avanzar en materia de aborto legal, creo que puede ser un avance importante, pero dentro de la prioridad en salud está disminuir tiempos de espera y esa es la prioridad. Formar más especialistas, tener más posibilidad de que la gente cuando se deriva a una interconsulta sea efectivamente atendida. Esa es la prioridad.
—¿Cuál es el plus de Jeannette Jara frente a los otros candidatos en la primaria oficialista? ¿Por qué alguien debería inclinarse por ud?
Diría que fundamentalmente por dos cosas. En primer lugar, porque los compromisos en los que estuvimos trabajando como Ministerio del Trabajo y Previsión Social, son los compromisos que, a pesar de tener mucho viento en contra, lograron cumplirse. En el caso de la Ley de 40 horas, recibimos un sueño y lo convertimos en una realidad. En el caso de (reforma de) pensiones recibimos una crisis, lo construimos en un acuerdo y creo que eso ya de por sí tiene una fuerza importante para los compromisos que como candidata hago frente a la ciudadanía, pensando en el futuro. O sea, ya hay una capacidad de gestión ahí probada. Y lo segundo es porque en el caso nuestro, programáticamente nuestro foco va a estar puesto en que este crecimiento que Chile tanto requiere desde hace una década, llegue a la familia y a la mesa de todos los chilenos y chilenas. Ese es nuestro énfasis.
—¿Y eso no lo ve en los demás candidatos/as?
Lo que pasa es que los debates no se han dado programáticamente todavía. Recién acabamos de tener el primero y sobre educación superior. Entonces, yo por lo menos lo que puedo decir son los énfasis que en mi programa hay y mi experiencia como gestora pública, que creo que puede servir para llevar adelante iniciativas que a veces han trabado durante mucho tiempo a la sociedad chilena, pero que demostramos en los hechos que se podía avanzar.
—¿Cómo cambiar esa perspectiva de “es una buena candidata, pero es comunista”? ¿Cómo enfrenta ese desafío?
Yo creo que con total transparencia hacia la ciudadanía. Es importante que la gente sepa quiénes somos sus candidatos. En mi caso, quién soy yo y qué he hecho en mi trayectoria de vida. La verdad es que creo que los que levantan ese tipo de comentarios lo hacen más con fines electorales que en realidad sea un sentimiento tan arraigado en la sociedad chilena. Pero bueno, la sociedad es democrática y hay diversidad de opiniones. Veremos lo que pase en las elecciones, no tengo grandes ansiedades sobre el tema, solamente decir que yo tengo claro quién soy y que me gustaría que la ciudadanía que me elija sepa quién soy en toda su integridad.
—¿Qué pudo haber hecho mejor la administración Boric, y que usted tendría como desafío?
Yo creo que en la administración del Presidente Boric, hay muchos temas en que se ha logrado avanzar y hay temas que van a quedar pendientes, pero es una administración que todavía se está desarrollando. O sea, le quedan unos nueve meses de gobierno y es un tiempo importante para seguir trabajando.
En mi caso, a mí lo que más me gustaría es destacar el tema de fortalecer la seguridad porque creo que la población lo está pasando mal. Hay una vulnerabilidad importante, sobre todo en las poblaciones donde el narco se ha ido instalando, donde el crimen organizado ha ido tomando espacio y creo que eso hay que combatirlo de frente, con más fuerza de la que se ha puesto hasta ahora.
—Tanto el presidente Gabriel Boric, como usted y los demás candidatos del oficialismo, tienen su pasado como dirigentes estudiantiles. Entonces, ¿qué valor le asigna a ese rol?
Es bien particular en esta elección que casi todos los que estamos de candidatos a las primarias, así como también el propio Presidente de la República, fuimos alguna vez dirigentes estudiantiles y yo creo que muestra una vocación por el servicio público, por las causas de la mayoría y por mejorar las condiciones de vida de las personas que es bien importante, una trayectoria en eso. Yo valoro mucho a quienes hoy día ejercen cargos de liderazgo y no solo desde el ámbito estudiantil, también como dirigente sindical o de organizaciones sociales, porque sabemos que a veces no solo no están exentos de críticas, sino que muchas veces pasan malos ratos, pero estar un poco al servicio de los demás también tiene que ver con tener la capacidad de tomar decisiones que a veces son populares y a veces no, pero que si uno las hace pensando en el bien común, ayudan a la sociedad chilena.
—O sea la trayectoria.
Yo creo que es importante y ayuda porque te da una perspectiva, además, distinta de cómo son las cosas. Es evidente que los jóvenes muchas veces interpelan a la autoridad y a mí me parece no solamente normal, sino que parte de la esencia de lo que es ser joven. Quienes estamos en política y somos más grandes, ya no somos dirigentes estudiantiles, tenemos que saber escuchar.
—En la elección pasada se habló de los votos cruzados, sectores de derecha -no militantes- que fueron a votar por el Presidente Boric para frentar la candidatura de Daniel Jadue. ¿No teme que haya un efecto similar?
Mire, no tengo esos temores. Creo que habría sido bueno que la derecha hubiese podido ponerse de acuerdo y tener su propia primaria, pero veo que no lo lograron. No tienen capacidad ni siquiera para ponerse de acuerdo. Y bueno, si nosotros nos sometemos a una primaria, hay que estar disponibles para asumir todas las reglas que esa primaria tiene y, en buena hora en Chile, pueden votar no solamente los militantes de los partidos de la primaria inscrita, sino que también los independientes. Así que estoy disponible para someterme a ese escrutinio público.
—¿Cuánto le afecta a su candidatura el caso Sierra Bella, con Irací Hassler y Karol Cariola, dos militantes del PC, involucradas? Hasta ahora su partido había quedado ajeno a estas polémicas. Estaba el PS con la fallida compra de la casa de Salvador Allende y el FA con el caso Convenios.
De todos los casos que están en sede investigativa, creo que lo que tienen que hacer es resolverse lo más pronto posible. Yo espero que, más que hablar de un caso en particular, quienes estamos en política sepamos conquistar la confianza de los ciudadanos.
—¿No le afectaría, cree usted?
La respuesta que le di es la que le puedo dar sobre el tema.
—Reforma de pensiones, Ley de 40 horas, aumento del sueldo mínimo y Ley Karin. Son reformas muy importantes. Entonces, ¿se atribuye esos logros? Fueron del ministerio que ud. lideraba.
Sí, a mí me tocó liderarlos, pero evidentemente son logros de un trabajo en equipo, en particular en las leyes que usted me menciona, con el ministro de Hacienda, Mario Marcel; y con la ministra de la Mujer, Antonia Orellana, porque muchos de los elementos tienen una clara perspectiva de género. Son logros en equipo, pero en varios de ellos me tocó liderar y eso es un hecho de la causa.
—¿Por qué cree que hay tanto interés, y muy reiterativo, en hablar de Venezuela y Cuba? Desde Chile.
No lo sé, me da la impresión de -a veces- que pueda haber intencionalidades que no tienen que ver mucho con el país, o con generar especies de cuestionamientos a la vocación democrática que yo como comunista podría tener, pero como tengo claro que tanto mi partido como yo misma hemos trabajado por contribuir a que en este país haya más democracia y los sectores desposeídos estén representados, en realidad me quedo tranquila. No hay nada más que pueda decir al respecto. Si alguien quiere armar polémica se lo dejo a los demás. Yo me estoy presentando de candidata para Chile y mis propuestas dicen relación con el.