El proyecto de ley “Educación sin Dicom” impulsado por un grupo de senadores fue aprobado en particular por la Comisión de Educación de la Cámara Alta.
En concreto, el proyecto prohíbe que cualquier deuda contraída para estudiar desde la educación preescolar a la superior, esté en el registro de sistema de deudas comerciales morosas o impagas conocido como Dicom.
Asimismo, la iniciativa legal en trámite obligaría a borrar de los registros a los actuales morosos en caso de convertirse en ley.
En la Comisión de Educación el mayor debate se centró en la discusión de indicaciones que apuntaban a evitar una eventual mala utilización de esta norma o aumento de la morosidad, las cuales fueron rechazadas por mayoría bajo el criterio que “la educación no puede ser tratada como un bien de consumo”.
Ahora, la iniciativa impulsada por la senadora Yasna Provoste y sus colegas Juan Ignacio Latorre, Carlos Montes y Jaime Quintana quedó en condiciones de ser analizada por la Comisión de Economía.
En paralelo, la instancia de Educación en el Senado despachó el proyecto de ley que otorga titularidad a la horas de extensión de profesionales de la educación que están bajo la modalidad de contrata y que es parte de los compromisos que asumió el Gobierno en la última respuesta que dio al petitorio del Colegio de Profesores.
