El martes, la Cámara de Diputados no alcanzó a votar el proyecto que establece la responsabilidad de las entidades bancarias frente al uso fraudulento de tarjetas de crédito.

Postergación que sirvió para advertir que al proyecto se le introdujeron cambios favorables a los bancos, entre ellos el pago de un deducible de 0.5 UF por cada operación fraudulenta que se realice antes que el cliente avise al emisor del robo o extravío de tarjetas de crédito.

Sin embargo, el ministro de Economía, José Valente, defendió las modificaciones al proyecto y recordó que la iniciativa fue aprobada con amplio apoyo de parlamentarios opositores.

El secretario de Estado, en concreto, recordó que los cambios fueron aprobados de manera unánime por parlamentarios del Frente Amplio, el Partido Comunista y todos los colores políticos.

Estas modificaciones fueron criticadas por el diputado socialista Marcelo Díaz, quien señaló que nuevamente una normativa que originalmente busca proteger a los consumidores, puede terminar afectándoles.

Una vez más, diputados y senadores se responsabilizan mutuamente por un proyecto de Ley.