Sólo uno de cada tres hospitales de alta complejidad en el país cumple con el rango óptimo de ocupación de camas planteado por el ministro de Salud, Emilio Santelices, es decir, una disponibilidad mayor al 15%.
Junto con ello, según reveló un estudio publicado por El Mercurio, 41% de estos recintos cuenta con un nivel de ocupación por debajo del recomendado, cifras que apuntan a una gestión intrahospitalaria y derivación de pacientes deficiente.
Además de la falta de especialistas, la saturación en la ocupación de camas constituye un factor determinante en las listas de espera para trasplantes, operaciones o atención médica en la red pública de salud.
Aldo Santibáñez, presidente de la Federación de Profesionales Universitarios de los Servicios de Salud, aseguró que hay un mal uso de la red, por lo que cree que es necesario inyectar recursos y modificar la dirección hospitalaria.
“Efectivamente, lo que existe es un mal uso de la red asistencial”, sostuvo.
En ese sentido, Gabriela Flores, presidenta de la Confederación Nacional de la Salud Municipal, coincidió en que hay un problema grave de comunicación, pero enfatiza que pasa principalmente por los gestores de servicios de salud.
“Hay un tema grave de comunicación…ellos son los que tienen que permitir el trabajo en red”, sostuvo.
Al respecto, el diputado socialista y presidente de la Comisión de Salud en la Cámara, Juan Luis Castro, manifestó que el problema principal es la ineficiencia en la derivación oportuna de pacientes, debido a la falta de conectividad entre recintos.
“Hay una gestión que no se hace…hay gente que está esperando más de la cuenta”, acusó.
El anunciado proyecto de Hospital Digital impulsado por el Gobierno vendría a mejorar en parte esta situación, ya que buscaría incorporar un sistema informático integral para la derivación de pacientes conforme a la disponibilidad de especialistas y camas.