El presidente de Sri Lanka, Maithripala Sirisena, prohibió este domingo el uso de cualquier tipo de prenda que cubra el rostro, después de la serie de atentados cometidos hace una semana y de los que se acusan a organizaciones islamistas locales.

Sirisena dijo que recurría a un decreto de poderes especiales para prohibir cualquier forma de cobertura facial en público. La restricción entrará en vigencia a partir del lunes, dijo su oficina en un comunicado.

“La prohibición es garantizar la seguridad nacional (…) Nadie debería ocultar sus rostros para dificultar la identificación”, indicó la declaración.

A partir de entonces, el rostro “deberá exponerse claramente”, añade el comunicado que precisa que la norma se ha implementado en el marco del estado de emergencia que rige en el país desde los ataques del pasado domingo cometidos por al menos nueve suicidas.

Clérigos islámicos instaran a no cubrirse el rostro

Esta medida se produce días después de que los clérigos islámicos locales instaran a las mujeres musulmanas a no cubrir sus rostros, en medio de temores de generar una reacción violenta después de los atentados con explosivos ejecutados por yihadistas afiliados al grupo del Estado Islámico (EI).

Redadas en varios vecindarios del país

Por otro lado, las fuerzas de seguridad han practicado en los últimos días una serie de redadas a varios vecindarios del país, con predominantes poblaciones musulmanas, tras la pista de los responsables de los ataques a tres hoteles de lujo y tres iglesias.

La Policía confirmó que entre los casi 150 detenidos se encuentra la esposa y la hija de Mohamed Zahran, el presunto organizador de los ataque. Las familiares del hombre sobrevivieron a la explosión de un suicida que se inmoló durante una redada de las fuerzas de seguridad a una de las casas seguras de los terroristas.

En la última semana los musulmanes han expresado su temor a las represalias en contra de la comunidad tras los ataques, y el ministro de Asuntos Religiosos Musulmanes, Abdul Haleem Mohamed Hashim, pidió el pasado jueves a estos no acudir a las plegarias colectivas del viernes.