Donald Trump lanzó un “salvavidas” a su aliado Jair Bolsonaro. Trump Media Group, una de las empresas del presidente de EE.UU, presentó una denuncia contra el juez de la causa contra el exmandatario brasileño por golpismo.
Según detalla The New York Times, la demanda fue presentada contra Alexandre de Moraes sólo horas después de que el juez del Tribunal Supremo de Brasil recibiera una acusación formal de parte de la Fiscalía contra Bolsonaro.
Específicamente, el conglomerado acusa al juez, quien debe decidir sobre la causa abierta contra el exgobernante por apoyar un golpe de Estado contra Lula da Silva, de “censurar ilegalmente las voces de derecha en las redes sociales”.
El citado medio añade que Trump Media & Technology Group, que es propiedad mayoritaria de Trump y que se encarga de administrar su sitio Truth Social, demandó a Moraes en un tribunal federal estadounidense en Tampa la mañana de este miércoles.
“Se unió como demandante Rumble, una plataforma de video con sede en Florida que, al igual que Truth Social, se presenta como un hogar para la libertad de expresión”, añade.
Ambas empresas acusan a Moraes de censurar el discurso político en EE.UU y de contravenir la Primera Enmienda al exigir a Rumble que borrara las cuentas de expertos y analistas brasileños de derecha.
La demanda señala que estás órdenes podrían afectar la visibilidad de esas cuentas en EE.UU, lo que iría en contra de la legislación estadounidense.
Bolsonaro se mostró indignado por acusación de golpismo
A través de sus abogados, el martes Bolsonaro se declaró “indignado” tras ser acusado por la Fiscalía de liderar un intento de golpe de Estado, en una denuncia que tachó de “inepta”, “incoherente” y “fantasiosa”.
“Jamás ha apoyado ningún movimiento que pretenda deconstruir el Estado Democrático de Derecho o las instituciones que lo habilitan”, afirmó el abogado Paulo Cunha Bueno en una nota compartida en las redes sociales del exmandatario.
El fiscal general de Brasil, Paulo Gonet, presentó el martes una denuncia contra Bolsonaro y otras 33 personas, incluyendo militares de alto rango y antiguos ministros de su Gobierno, por urdir un golpe de Estado tras perder los comicios de 2022 ante Lula da Silva.
La defensa del ex jefe de Estado aseguró haber recibido con “asombro” e “indignación” la querella formulada por el Ministerio Público Federal.