El pasado jueves 4 de abril se estrenó Pet Sematary, la nueva adaptación cinematográfica de la terrorífica novela de 1983 de Stephen King.
Se trata de un libro que en 1989 ya había sido llevado al cine, cinta que a pesar de las limitaciones técnicas terminaría convirtiéndose en una cinta de culto en el género del terror.
En esta ocasión los encargados de dirigir la obra son Kevin Kölsch y Dennis Widmyer, mientras que el guión estuvo a cargo de Jeff Buhler.
Para quienes no han leído la obra de King o no hayan visto alguna de sus adaptaciones, la historia trata sobre Louis Creed, un médico de urgencias que decide cambiar de trabajo para pasar más tiempo con su familia.
Es así como Louis junto a su esposa Rachel, sus hijos Ellie y Gage y su gato Church llegan hasta su nueva casa en Maine, la que está ubicada junto a una peligrosa carretera.
Pero no sólo eso, ya que en su patio trasero se encuentra un cementerio de animales, y más allá hay un misterioso lugar al que es mejor no ir.
Sin embargo, luego que se produzca una tragedia familiar, el vecino de la familia, Jud Crandall, llevará a Louis hacia este oscuro cementerio que tiene el poder de traer a la vida a quien sea enterrado ahí.
Aunque el anciano tenía buenas intenciones, esto no hará otra cosa que desencadenar una serie de trágicos hechos que hará que todo salga mal.
Cabe destacar que si bien la nueva película está basada en el libro, lo cierto es que posee una serie de diferencias, no sólo con la obra de King, sino que también con la cinta estrenada en 1989. ¿Quieres saber cuáles son? En la siguiente reseña te lo contamos.
Lo primero que hay que tener en cuenta, y que de hecho se pudo apreciar en uno de los adelantos, es que en esta cinta los padres sufren la pérdida de Ellie, a diferencia del libro y de la cinta ochentera en que quién moría trágicamente atropellado era Gage.
Es posible que esto no le agrade en absoluto a los más puristas, no obstante el cambio tiene una explicación: según indicaron los directores, era más fácil lograr escenas de terror interpretadas por una niña de 11 años que hacerlo con un bebé.
La interpretación de la niña es bastante buena, ya que transmite la inocencia de una pequeña frente a temas como la muerte. Sin embargo, el problema aparece cuando regresa a la vida, ya que en su nuevo estado no logra producir un impacto en el espectador.
Pero eso no es todo. Al ser el bebé quien fallece en la historia original, es precisamente Ellie a quien Victor Pascow (el estudiante que muere en la universidad en que trabaja Louis) se dirige para advertirle sobre lo que pasará con su familia. En la nueva película es la niña quien muere, por lo que Pascow alerta a Gage, algo que no tiene mucho sentido.
Otra diferencia es que en esta adaptación no se muestra el proceso en que Louis y Jud forjan su relación de amistad. En la historia original, el médico ve al anciano como si fuera su propio padre, mientras que en esta cinta sólo se muestra como Jud conoce a la pequeña, y a partir de ahí se hace un salto hasta que la familia y el vecino son amigos.
De esta manera, el principal vínculo afectivo que se desarrolla en esta entrega es el de Jud y Ellie, dejando su amistad con Louis en un segundo plano.
Otro punto importante de la historia es el atropello del gato Church, la cual de hecho es la primera muerte que vemos en la historia y que llevaría al padre de familia a tomar una decisión para saber si ocultar su partida a su hija o no.
Por su parte, en la novela (y en menor medida, en la cinta de 1989) se explica que no todos los que son enterrados en el cementerio maldito reviven de mala manera: mientras algunos pueden volver a la vida sumamente perversos, otros simplemente lo hacen en “modo zombie”.
En esta cinta se deja en claro que todos quienes son enterrados reviven de una forma maligna. Si Jud sabía esto, resulta un tanto ilógico que le enseñara el lugar a Louis para que reviviera a su gato.
En cuanto a los niños con tétricas máscaras que aparecen realizando un ritual de entierro en el cementerio de animales, no aportan demasiado a la historia, más allá de agregar estilo a la ceremonia.
Respecto a la relación de Rachel con su hermana fallecida hace varios años, en esta cinta se le deja a ella como la responsable de la muerte de Zelda, mientras que en la versión original no es así.
Finalmente llegamos al desenlace de la película, la cual no logra cumplir con su objetivo de impactar al espectador. En la película original Louis, al ver el desastre que había provocado con su familia, decide enterrar a Rachel en el cementerio, quien finalmente vuelve a la casa, dejando entrever el inevitable destino del médico.
En esta ocasión, el final se convierte en una serie de muertes y asesinatos que no provoca mucho. Se deja un final un tanto abierto ya que Gage es el único que se “salva”, cambio en la historia que no convence.
Conclusiones
En cuanto a las interpretaciones, se debe dar un punto a favor a la película, ya que la mayoría de los actores realizan un buen trabajo, especialmente Louis, quien en esta ocasión supera con creces al actor de la cinta ochentera.
La fotografía y efectos de maquillaje también sobresalen, ofreciendo un cementerio maldito bastante tenebroso.
No obstante, los cambios que se agregaron no terminan por convencer. Es entendible que hayan querido jugar con el misterio, considerando que la mayoría de quienes la querrán ver saben qué es lo que ocurre.
Lamentablemente la cinta cae en el susto fácil, a diferencia de la historia original que juega más con las sensaciones que provoca un tema tan delicado como la partida de un ser querido.
Da la impresión que los encargados de la cinta optaron por apelar a un tipo de terror más moderno, como lo que ocurre con los virales conocidos como Creepy Pasta. Si bien puede resultar con un público más juvenil, se trata de un estilo que no provoca mucho en el público adulto, que es el que en su mayoría compone el universo de fans de Cementerio Maldito.
Si eres fan de la novela original de Pet Sematary, es sumamente probable que esta película no te guste, y te quedes con la antigua. Pero si nunca has leído el libro, quizás no odies tanto la cinta. Sumando y restando, el filme decepcionó en cuanto a las expectativas.
