La construcción de viviendas nuevas en Estados Unidos se desplomó un poco más del 30% en abril con respecto al mes anterior, en medio de la paralización de actividades para evitar la propagación del Covid-19, según datos del gobierno publicados el martes.
Con 891.000 unidades, la tasa de construcción de viviendas nuevas en abril se ubicó 30,2% por debajo de la estimación revisada de marzo de 1.276.000, informó el Departamento de Comercio.
Y está 29,7% por debajo de la tasa de abril de 2019 de 1.267.000, apuntó.
Los descensos se generalizaron en todo el país y el Noreste sufrió el mayor impacto, con una disminución de casi un 44%, mientras que la región del Medio Oeste tuvo un declive relativamente pequeño de 15%.
La construcción de viviendas multifamiliares tuvo el golpe más severo en la mayoría de las regiones.
Mientras tanto, los permisos para nuevas construcciones, que en tiempos normales son una señal de la demanda, cayeron un 20,8% en comparación con marzo.
Pero con la pandemia del coronavirus en curso, nada es normal.
“Debido a los recientes acontecimientos relacionados con la pandemia, muchos gobiernos y empresas están operando con una capacidad limitada o han cesado sus operaciones por completo”, dijo el Departamento de Comercio, y agregó que la calidad de los datos cumple con los estándares de publicación.
La vivienda es un sector crítico de la economía de Estados Unidos. La demanda de viviendas era alta antes de la crisis sanitaria, debido a las bajas tasas de interés de los préstamos hipotecarios, y los constructores luchaban por mantenerse al alza mientras los precios subían.
Después de que la Reserva Federal (Fed, banco central) redujo a cero la tasa de interés de referencia, se podría esperar que eso ayudara a la compra de viviendas, pero con la pérdida de más de 30 millones de empleos debido a la pandemia, al menos temporalmente, las perspectivas siguen siendo inciertas.
Aún así, “la construcción de viviendas probablemente ha tocado fondo”, dijo Ian Shepherdson, de la consultora Pantheon Macroeconomics.
“Una fuerte caída en la actividad era inevitable debido a los confinamientos, pero creemos que estos números marcarán el piso; mayo será mejor y junio aún mejor”, dijo en un análisis, señalando que las solicitudes de hipotecas aumentaron.