La parodia de “Los Simpson” a Morrissey no cayó para nada bien en el entorno del cantante, desde donde a horas de su estreno criticaron duramente a los productores de la longeva serie estadounidense.

Se trata del capítulo “Panic on the streets of Springfield” (un guiño a “Panic in the streets of London” de The Smiths), donde uno de sus personajes centrales está inspirado directamente en el artista: “Quilloughby”, cuya voz estuvo a cargo del inglés Benedict Cumberbatch.

En la trama, Lisa se imagina y enamora de un inquietante músico británico vegano (“Quilloughby”), líder de la banda “The Snuffs”, del cual se defrauda rotundamente cuando acude a verlo a un festival en la vida real.

Allí, la estudiante constata que el icónico Quilloughby se ha convertido en un grosero xenófobo y carnívoro, y que incluso simpatiza con algunas ideas de ultraderecha.

Tras la emisión del episodio, Peter Katsis, manager de Morrissey, compartió mediante el fanpage en Facebook del inglés una declaración al respecto.

“Sorprendente cuánto se deterioraron los guiones de Los Simpson en los últimos años. Lamentablemente, el show creaba una visión de la experiencia cultural moderna, pero desde entonces ha degenerado a intentar aprovechar la controversia barata y exponer rumores viciosos”, señaló.

“(El programa) cometió la bajeza de usar tácticas de odio, como mostrar al personaje de Morrissey con la panza asomándose por su camisa, lo cual hace que uno se pregunte quién es realmente el que está hiriendo en esta situación… Llamar al personaje racista, sin señalar ningún caso específico, no ofrece nada. Solo sirve para insultar al artista. Deberían tomar ese espejo y mirarse a ellos mismos”, agregó.

La parodia de Los Simpson recoge algunas de las últimas polémicas del compositor, como sus dichos sobre China (“No puedes evitar sentir que el pueblo chino es una subespecie”), su oposición a las políticas migratorias de Inglaterra y su apoyo a ideas nacionalistas en Europa.

“De lo que nadie está hablando es de lo insultante que es realmente. El chico (Morrissey) sigue siendo un súper vegano. Sus creencias en los derechos de los animales son lo que lo han llevado a este punto”, comentó el representante a la revista The Rolling Stone.

“Es difícil entender cómo alguien que tiene a Thelma Houston cantando en su último sencillo, o que ha sido un gran defensor de los escritos de James Baldwin, o que tiene tres latinos en su banda, podría ser llamado racista”, agregó.