La presidenta Bachelet ante la Asamblea General de la ONU llamó al estricto respeto a tratados y no hacer un uso indebido de mecanismos para resolver diferencias.

“Nuestro país es consciente de velar por el buen funcionamiento del sistema internacional, un elemento esencial es el apego a derecho internacional que incluye el estricto respeto a los tratados como una garantía de paz y estabilidad internacional”, recalcó la mandataria en el encuentro internacional que reúne a los jefes de Estado.

“Ello requiere respetar lo pactado, así como no hacer un uso indebido de los mecanismos que hemos diseñado para resolver pacíficamente las diferencias que realmente pudiesen existir”, agregó.

Dichas declaraciones surgen luego que el presidente boliviano, Evo Morales planteó en una entrevista exclusiva con Radio Bío Bío en EE.UU. que durante el primer mandato de Bachelet se abrió la posibilidad a establecer un enclave marítimo para su país a través de las costas chilenas.

Asimismo el mandatario criticó a quienes trabajaron en la altos puestos del aparataje público y “que vivieron a costas” de la ONU, haciendo una clara alusión al canciller Heraldo Muñoz y a la presidenta Michelle Bachelet.

Mientras que en Chile el vocero de Gobierno, Marcelo Díaz, reaccionó a esos dichos y si bien reconoció que existieron conversaciones con Bolivia salió a desmintir que nuestro país se haya planteado un debate acerca de la soberanía.

Fue en ese contexto que al comienzo de la jornada en la Asamblea General de la ONU, Bachelet y Morales se saludaron cordialmente en el acceso a esa instancia.

Chile acogerá a refugiados sirios

A su vez la mandataria confirmó que nuestro país recibirá a refugiados de la guerra en Siria.

“El mundo de hoy enfrenta desafíos y tareas que ha afectado a la seguridad internacional en Medio Oriente, en el norte de África y Europa afectando principalmente a grandes poblaciones civiles que viven desesperados para salvar sus vidas y forjar un mejor destino”, recalcó la jefa de Estado.

“Como comunidad internacional tenemos obligación de reaccionar solidariamente para reestablecer la paz y dar una respuesta que nos permita disminuir el sufrimiento de la guerra y de los que escapan de ella. Mi gobierno ha decido a acoger a refugiados de la guerra civil en Siria”, añadió.

Asimismo Chile fortalecerá la cooperación con África donde a partir de 2016 participaremos en las operaciones de paz de Naciones Unidas.

Agenda para el desarrollo

Asimismo la jefa de Estado sostuvo que se establecerá un acuerdo entorno a la agenda para el desarrollo hasta 2030. “Esta agenda es alentadora y nos compromete, pone en el centro el enfrentamiento de los diversos rostros de la desigualdad. Es el principal desafío de América Latina”, indicó Bachelet.

“Se trata de una agenda amplia y ambiciosa, pero acorde con los desafíos de una convivencia humana justa, creativa y pacífica. No ignora los compromisos aún pendientes. Pero, incorpora nuevos objetivos y metas integrándolos en un sentido multidimensional en la idea de desarrollo inclusivo y sostenible”, añadió.

La mandataria indicó que esa agenda de cambios permite establecer “la igualdad dentro y entre los países, entre los géneros, el crecimiento, la industrialización, el consumo inclusivo y sostenible, el cuidado del medioambiente en sus distintas facetas y la paz social”.

Y añadió que “tenemos una oportunidad de enfrentar los signos de desesperanza frente al futuro, de la desconfianza frente a las instituciones que recorren algunas de nuestras sociedades. La primera responsabilidad por un desarrollo sostenible recae en cada uno de nuestros países”.

Bachelet enfatizó que “Chile se compromete con convicción y entusiasmo en esta tarea. Sin embargo, este empeño requiere de un entorno favorable, ya que parte de las metas están afectadas por el desarrollo sostenible, ya que muchos de los desafíos que enfrentamos no pueden ser enfrentados de manera aislada por cada país”.

A su vez dijo que apunta a promover sociedades más inclusivas y sostenibles, indicando que “sólo será posible si somos capaces de llevar adelante una agenda de cambios a nivel nacional, pero también global”.

Y agregó que “cuando el comercio internacional no es un motor para el crecimiento, si los flujos financieros son asimétricos mínimos y volátiles, sino existen mecanismos justos y eficaces para la resolución de la deuda soberana, sino existen corrientes predecibles y suficientes para el desarrollo, los países emergentes y con mayor razón los países más pobres enfrentarán grandes obstáculos en el cumplimiento de la agenda”.