La ministra de Justicia, Javiera Blanco, habló esta mañana en el Palacio de La Moneda acerca del futuro de Punta Peuco, señalando de forma categórica que la decisión del cierre del recinto penal aún no es clara, y que si ésta es efectiva, se comunicará.

Esto a raíz de las expectativas que se produjeron luego que la sobreviviente del Caso Quemados, Carmen Gloria Quintana, afirmara que la Presidenta Michelle Bachelet se habría comprometido a cerrar dicha unidad carcelaría creada para miembros de las Fuerzas Armadas condenados por violaciones a los Derechos Humanos.

Al respecto, Javiera Blanco, explicó que en la actualidad las medidas de seguridad de la cárcel de Punta Peuco son iguales que otros recintos.

La secretaria de Estado añadió que las capacidades del recinto penal están en su límite, por lo tanto, el cierre aún no es una decisión confirmada debido a que podrían ingresar futuros condenados por la Justicia a raíz de las violaciones de DD.HH. en plena dictadura.

Al respecto, la senadora y presidenta del Partido Socialista, Isabel Allende, enfatizó en que la actual administración debe “bajar la cortina” de Punta Peuco.

“Nos parece que no es el momento para que haya este tipo de privilegios; aunque tenga el régimen carcelario, pero sabemos que obviamente hay privilegios (…) una cosa es la seguridad, otra son los privilegios”, sentenció.

“No tengo fecha, pero yo creo que como socialistas yo creo que debiera cerrarse Punta Peuco, y el gobierno verá en qué momento, cuándo lo va a hacer; pero yo espero que lo haga este Gobierno, que es mi Gobierno”, puntualizó.

Mientras, el presidente del Senado, el demócratacristiano Patricio Walker, coincidió con Allende en rechazar que se hayan levantado cárceles especiales para los militares condenados por delitos contra los Derechos Humanos.

“Si bien es cierto que algunas personas por razones de seguridad tienen que estar segregadas, a mi en lo personal no me gusta que hayan cárceles especiales”, estimó.